«A veces creo que Trump puede ser el último presidente de EE. UU.»

TEXTO: MARÍA ESTÉVEZ

FUGAS

TIZIANA FABI

Pocos directores apuntan con tanta precisión al corazón de Estados Unidos como Michael Moore. En su último trabajo explica por qué «un bufón y un mentiroso» ha llegado a la presidencia de su país

17 nov 2018 . Actualizado a las 09:39 h.

En Farenheit 11/9 Moore le echa un pulso cinematográfico a Donald Trump: «¿Cómo demonios ha sucedido esto?». De eso trata un largometraje que le permite, una vez más, analizar a su país y a sus conciudadanos, como en los célebres Bowling for Columbine: un país en armas (2002), que se llevó un Oscar al mejor documental o ¿Dónde invadimos ahora? (2015).

-Su documental cuestiona la llegada de Donald Trump al poder. ¿Usted acusa a los medios de comunicación de su llegada a la presidencia?

-Sí. Tuvieron mucha culpa porque las audiencias se disparaban cada vez que le sacaban en pantalla hablando del muro que iba a construir en la frontera con México. Donald Trump no cayó del cielo, fue el resultado de una larga espiral que culminó en uno de los capítulos más oscuros de nuestra historia, con Trump conquistando la oficina más poderosa del mundo.

-¿Que le motivó a dirigir el filme?

-La situación de urgencia que se vive en Estados Unidos. Esta es mi película más emocional y, tal vez, la más importante. Quiero contribuir con ella a la caída de Trump. Tenemos que acabar con el sistema corrupto que le puso en la presidencia. Barack Obama nos dio una falsa esperanza que ahondó la brecha entre los demócratas y los republicanos. Trump es nuestro Frankenstein y nosotros somos su doctor Frankenstein. Esta puede ser mi última película, porque existe un proceso dedicado a minar nuestra democracia, hasta el punto de sentirme en las trincheras de la resistencia francesa.

-¿No está exagerando?

-Este filme muestra cómo hemos llegado hasta aquí. Cómo Flint y el gobernador Rick Snyder (Míchigan) han tratado de manejar las leyes a su antojo. Se hubiera podido predecir el triunfo de Trump prestando más atención a los ciudadanos de Flint.

-¿Cree que existe un cambio real de cara a las próximas elecciones presidenciales del 2020?

-Todos tenemos la oportunidad de abrir los ojos, de no aceptar el statu quo y activarnos para luchar por un mejor mañana. Con esa actitud me enfrenté a este filme, la historia no ha terminado. Este documental es una llamada al activismo y a la resistencia. Hay que decir: basta ya. Debemos pensar en nuestras familias y nuestras comunidades. La única forma de conseguir que se haga justicia es poniéndose en pie. No de forma violenta, por supuesto, pero con seguridad y no dejando que nos quiten las libertades civiles.

-¿Ha perdido Michael Moore su sentido del humor?

-No, pero admito que la situación del país me ha obligado a cambiar mi forma de dirigir. Yo no voy a hacer bromas sobre Trump. No puedo reírme. No hay nada divertido ante lo que está ocurriendo. Soy uno de los pocos que le tomó en serio desde el principio. [Moore predijo que ganaría en julio de 2016 y asegura que saldrá reelegido en el 2020]. Nunca he pensado que fuera divertido, al contrario, creo que es un genio. Es uno de los mejores actores de la historia. Un genio diabólico capaz de superar en inteligencia al partido demócrata, tal vez, el presidente más inteligente de la historia. Ha destruido al partido republicano. En realidad, ellos se han entregado y destruido a solitos. A veces pienso en que puede convertirse en el último presidente de Estados Unidos.

-¿Hay un cambio real dentro del partido demócrata?

-Sin duda. Veo la luz entre las nubes más oscuras. Hay candidatos ordinarios que son gente extraordinaria. Ellos representan a la resistencia. En la película vemos candidatos con capacidad de inspirar a su electorado como Rashida Tlaib (ayer ganó en su distrito, la primera mujer musulmana en ir a la Casa de Representantes). Hay un movimiento en marcha con capacidad para cambiar el statu quo. Yo me apunto a esa llama del progreso político, pero queda mucho por hacer.

-Usted ha dicho que Hillary Clinton fue muy inteligente.

-Sí. Clinton fue capaz de convencer a los demócratas. Con su inteligencia supo maniobrar para rechazar a Bernie Sanders y a sus votantes, sin embargo, pagó las consecuencias por ello.