El menú de fútbol televisivo, que tras la liga y la Champions continúa con el Mundial que comenzó ayer en Rusia, tiene ahora de postre media docena de títulos (y varios en producción) que anuncian el balompié, acompañado de sus glorias y sus miserias, como protagonista. Como dice la canción de AC/DC que promociona los partidos a la Roja: «¿Are You Ready For a Good Time?»
15 jun 2018 . Actualizado a las 16:58 h.El deseo de triunfo, la gloria y el fracaso, la pasión desmedida por unos colores, las corruptelas alrededor de unas competiciones en las que se mueven cifras astronómicas... el fútbol tiene todos los ingredientes para que una película o una serie enganchen al espectador incluso aunque lo suyo no sea este deporte de once contra once. Quizás por ello uno y otro estén entre los grandes espectáculos de nuestros tiempo. El fútbol moderno nace en Londres con la creación de la The Football Association en 1863, aunque el cine no lo haría hasta 1895, en París, con las primeras proyecciones de los hermanos Lumiérè. Muy pronto la pantalla se interesó por el fútbol y este acabó encontrando una suculenta fuente de ingresos con la televisión. El círculo se cerrará la próxima temporada, con la llegada del famoso VAR, que permitirá a los árbitros ver repetidas las jugadas en un monitor antes de tomar decisiones.
A la espera de ello, que será un auténtico espectáculo (y si no, al tiempo), la ficción audiovisual se sigue ocupando del balón y de sus complejas circunstancias. Seis producciones recientes optan por sacar a relucir el lado humano de un deporte que también es negocio suculento.
Este domingo Netflix estrena La Balada de Hugo Sánchez, serie derivada de la mexicana Club de Cuervos en la que el protagonista se encarga de llevar a su club a un torneo en Nicaragua. Hugo (que pese al nombre nada tiene que ver con el crac que jugó en el Madrid) sale de su zona de confort para hacerse cargo de un equipo y de su propia vida.
En la uruguaya Mi mundial, de coproducción argentina y brasileña, Carlos Andrés Morelli cuenta la historia de Tito, que a sus 13 años -lo borda el actor infantil Facundo Campelo- es un fenómeno balompédico que sueña con sacar a su familia de la pobreza tentado por la oferta de un ojeador. Las cosas se tuercen a causa de un accidente de moto, pero su moraleja va más allá e invita al espectador a la reflexión, incluyendo al sistema educativo. Se estrena el día 22.
Desde Argentina, oscilando entre la comedia y el drama, acaba de llegar a las pantallas El fútbol o yo, en la que Marcos Carnevale afronta cómo la adicción al fútbol puede acabar poniendo en serio riesgo familiar y laboral a quienes la padecen, como le sucede a su protagonista, encarnado por Adrián Soar, que es además coautor del guion. Al tiempo, el trabajo de Canevale refleja la pasión que ese deporte provoca en el país de Maradona y Messi.
España también aporta su grano de arena al tema, esta vez en clave de comedia familiar, dirigida en especial al target infantil, con Los futbolísimos, en torno a un grupo de niños y niñas que deberán hacer lo imposible para evitar la desaparición de su club, el Soto Alto Fútbol Club. Si no ganan los siguientes partidos, además del descenso, sus padres y madres disolverán el equipo. Se estrena el 24 de agosto.
De libro a película
Española, destinada a la televisión y coproducida por Mediapro, es la serie dirigida por Daniel Calparsoro, El fútbol no es así, actualmente en fase de posproducción y basada en la novela del mismo título de Pedro Torrens y Javier Tebas, presidente de la Liga. La trama, que afronta el lado oscuro del deporte, se centra en un empresario de provincias que se marcará como objetivo llevar al club de su vida hasta la Primera División, con todo lo que eso implica en lo económico y lo humano, asesinato por medio. Además del gallego José Ángel Egido, el reparto lo encabeza Roberto Enríquez y Toni Corvillo, entre otros.
Ya en clave documental, sin despreciar unos toques de telerrealidad, es la serie First Team: Juventus FC, apadrinada por Netflix y centrada en el club italiano del veterano guardameta Buffon -que acaba de irse al PSG- Chiellini o Higuaín y el mítico Del Piero, entre muchos otros.