«Soy un gallego de Alicante que hasta tiene carné del Xabarín»

TEXTO: F. MOLEZÚN

FUGAS

cedidas

Bajo el título de «Noche sin filtro» se reúnen mañana en Vigo cuatro cómicos de los que no se callan

16 feb 2018 . Actualizado a las 05:30 h.

Un gallego nacido en Alicante. Así se define Antonio Castelo, uno de los cómicos más difíciles de domar de cuantos pueblan la saludable escena estatal del humor: «Mi familia es toda de Cazás, una aldea de Lugo, y he veraneado siempre en Ferrol. Incluso tuve carné del Xabarín», explica este humorista que compartirá escenario mañana en Vigo, en el auditorio Afundación (20.00 horas, entradas desde 17 euros) con otros de su cuerda: Oswaldo Digón, Iggy Rubín y Luis Álvaro.

-El show se llama «Noche sin filtro»...

-Es porque los cuatro cómicos que nos juntamos hacemos unos números en directo que suelen ser fuertecitos. En verdad sí que hay un filtro, el nuestro, pero es cierto que es un filtro por el que pasa todo más fácil. Es una noche de comedia para no llevar a los niños.

-Atreverse con algo así hoy en día, con lo sensible que está el personal, tiene su aquel.

-Antes salían por la tele Manolo Royo o Arévalo contando chistes muy fuertes bajo el paraguas de un personaje y no pasaba nada. Si ahora hago en la tele un monólogo como el que veremos en Vigo se colapsarían las redes sociales. Todo el mundo parece estar deseando que se les hiera en sus sentimientos. Mucha gente hace bandera de determinadas causas porque piensan que eso les hace parecer mejor persona, cuando puedes defender los derechos de los animales pero ser un tipo deleznable. Estamos en un momento delicado, no es fácil hacer comedia. Por eso creo que está bien avisar de que esta noche vamos a ir a lo loco, para que solo venga quien le apetezca escuchar reflexiones salvajes.

-Se les puede colar alguien que vaya precisamente a ofenderse.

-Es posible. Pero solo se siente ofendido aquel que se toma demasiado en serio a sí mismo. Los que tenemos claro que no somos tan importantes lo tenemos más fácil.

-¿Ha puesto límites a su humor ante tanto ofendido?

-No, pero a lo mejor esa es la razón por la que no soy rico. De momento me mantengo en mi estilo, que tampoco creo que sea tan fuerte. Es que tradicionalmente el bufón es quien está legitimado para hablar de cosas de las que nadie habla porque lo hace con un vestido de comedia. Tenía pensado abrir el monólogo hablando del Chicle y del Cuco, porque son gente que están fastidiando los motes más amables del mundo, como de buena gente. Realmente no hablo del Chicle ni de los horrores que cometió. Solo pretendo, ante un tema muy duro en el que todos sentimos pesar, distenderlo para hacerle la vida más suave a la gente. Y cobrar por eso, claro, que es mi trabajo.

-Un trabajo necesario.

-Puede que no sea el más necesario, pero la comedia es como ir al psicólogo o al gimnasio.

-Da la impresión de que en el escenario se suelta más que en la tele.

-En el escenario soy mi único jefe, mientras que en la tele dependes de muchas personas. El escenario es droga sin cortar, como un fardo encontrado en medio del mar.