«Si fuera gallega, estaría orgullosa»

TEXTO: RODRI GARCÍA

FUGAS

Paul Nicklen

Sus trabajos en «National Geographic» o «Time» avalan el prestigio de esta fotógrafa que llega a Galicia con un mensaje de preocupación sobre el calentamiento global

15 sep 2017 . Actualizado a las 05:40 h.

«Nunca me habían invitado». Es su respuesta, acompañada de una cálida risa, al porqué ha tardado tanto en hacer su primera exposición en España. Será a partir del próximo martes, día 19, en la sala Palexco, de A Coruña, y dentro del Festival Mar de Mares. Cristina Mittermeier confiesa: «Para los mexicanos España es como una meca». Además, «los pueblos de Galicia me recuerdan mucho a la parte de México donde vivo, en el estado de Morelos». Esta mujer, referente mundial en activismo medioambiental, mostrará un trabajo fotográfico con imágenes que van desde India a Hawái pasando por el Ártico o Groenlandia. En este último lugar, donde estuvo hace poco más de un año, comprobó un dato más del cambio climático cuando unos pescadores echaron un anzuelo al mar, sacaron unos peces y empezaron a hacerles fotos con el móvil; al preguntarles por qué «me explicaron que eran bacalaos europeos que estaban a mil kilómetros más al norte de su ubicación habitual». Implicada en numerosas causas medioambientales, Mittermeier es, según los organizadores del Festival Mar de Mares, «una de las ponentes de National Geographic más solicitadas del momento».

-¿Por qué ha titulado la exposición «En la orilla»?

-Mirando hacia atrás he visto que pasé la mayor parte de mi vida en la orilla del agua. Hay más de un billón de personas en el planeta que viven en esa orilla, dependen de los recursos que hay ahí y es fundamental conservarlos, por la supervivencia del planeta.

-¿Qué destacaría de esas imágenes?

-Considero que he tenido una carrera muy afortunada y cuando la ves en retrospectiva hay ciertos hilos que lo unen todo y son la conexión de las personas con el mar, con los ancestros y con la naturaleza.

-¿Qué es lo que más daña al mar?

-La gente no ve lo que hay bajo el agua. Lo que más daña son los desechos industriales, la cantidad de basura que hay en el mar, y la de plástico que ya está entrando en la cadena alimenticia y acabará afectándonos. No es fácil pero con un trabajo serio y una legislación adecuada sería posible eliminar los plásticos y limpiar el mar. Lo que no podemos parar es la extinción de las especies y eso es primordial.

-¿Por qué llegamos a esa extinción?

-En los años 80, cuando terminé de estudiar, se decía que el mar iba a ser la despensa de la Humanidad, que iba a dar de comer a todos. Tras explotarlo sin tregua hemos visto que los recursos son limitados. Galicia ha adoptado la postura de la sustentabilidad en sus mares y ese es un ejemplo a seguir...

-¿Conoce la situación de Galicia?

-Cuando me invitaron a venir al Festival Mar de Mares pedí a los organizadores conocer los mares de Galicia. He estado desde Baiona a Lira o Carnota para ver y hablar con la gente. Visité una fábrica de conservas y quedé impresionada de la tecnología, de toda la cadena de trabajo y de la calidad, porque es casi un producto de joyería. Existe un fundamento social y legal que beneficia a todo el mundo, sobre todo al mar. Con el ejemplo de Galicia podemos inspirar a otros países. Si yo fuera gallega estaría muy orgullosa.