Veljko Mrsic: «No creo en los nombres, sí en los equipos y aún no construimos el que queremos»

SENÉN ROUCO / ÁLEX LÓPEZ-BENITO

En un Pazo vacío y en silencio, y con la pizarra guardada, Veljko Mrsic (Split, Croacia, 1971) es un tipo sereno y cordial. Transmite sosiego y convence con un discurso reposado y sin picos en el tono de voz. Es día de descanso para el Breogán, pero su entrenador accede a la petición de La Voz y acepta la entrevista. Llegó al Río Breogán en enero del 2022 por unos meses y va a por su cuarta temporada en el cargo.

—En una escala del 1 al 10, ¿en qué punto de forma se encuentra el equipo a las puertas del inicio de la ACB?

—Con tanto contratiempo no hemos podido jugar ningún partido con la plantilla al completo. Diría que en esa escala estamos en el 4 o el 5. Queda mucho para alcanzar el pico de forma al que queremos llegar.

—El broche a la pretemporada fue perfecto. Victoria en el Pazo, en un derbi, brillando en ataque y levantando un título. ¿Una inyección de moral para Bilbao?

—Seguro que nos dará moral y confianza en el trabajo que estamos haciendo porque en los partidos anteriores habíamos sufrido bastante para hacer nuestro juego. Ante el Leyma hemos tenido más fluidez. Creo que el Bilbao llegará al debut un poco por encima de nosotros en rodaje porque tienen cinco jugadores de la pasada temporada y no han tenido lesiones. El primer partido siempre pesa.

—Dicen los expertos que la exigencia ha vuelto a subir en la Liga Endesa.

—Desde mucho tiempo atrás se dice que es la mejor liga doméstica de Europa. No solo es cierto, sino que además cada año sube el nivel. También en la Primera FEB, como pudimos comprobar en la Copa Galicia con el Obradoiro y el Ourense plantando cara a dos ACB.

—¿Cuáles son sus favoritos para el título?

—Los de siempre, Real Madrid, Barcelona... El Unicaja lleva varios años a un nivel muy alto y han mejorado el equipo, Baskonia, los dos canarios, el Murcia llegó a la final el año pasado... Hay muchos equipos buenos.

—¿Sitúa al Baskonia en el podio de candidatos tras el fichaje de Pablo Laso?

—Con Laso todo es posible, pero creo que no está en la primera línea para ser campeón.

—¿Predice tanta igualdad por el otro extremo de la tabla?

—La misma que el año pasado, aunque también depende en gran medida de las dinámicas de los equipos en el inicio del campeonato, si alguno se hunde o no al principio. La liga es muy, muy dura, son 34 jornadas y ahora es difícil hacer pronósticos. Podemos acertar con cinco o seis equipos que van a estar seguro en el play off, pero de ahí hacia abajo puede pasar de todo.

—¿Será el arranque liguero lo que determine las aspiraciones de este Breogán?

—No, en nuestro caso no, seguro. Iremos mejorando en cada partido como hicimos la liga pasada, cuando en algún momento fuimos los máximos candidatos al descenso junto al Palencia y en el tramo final le dimos la vuelta a la situación. Este año esperamos tener menos problemas con las lesiones y tener más continuidad en el juego para alcanzar antes nuestro mejor nivel.

—Por nombres, este Breogán ofrece más garantías que el del curso pasado.

—No creo en los nombres, creo en los equipos y nosotros aún no hemos construido el que queremos. Estamos en el camino.

—Pero hay más talento.

—¿Qué es el talento?

—Hay más capacidad anotadora, sobre todo en el perímetro.

—Vamos a ver.

—¿La defensa será igual de imprescindible que en la pasada liga?

—Siempre. Con una buena defensa siempre puedes ganar, es lo único que te garantiza algo,

—Dice Moore que se puede soñar con este Breo. ¿Coincide?

—Es un gran jugador, pero novato en la ACB y no sabe lo que se va a encontrar.

—Si pudiera repescar a alguno de los jugadores que salieron del equipo a final de liga, ¿por cuál se inclinaría?

—Solo miro adelante y pienso en el presente.

«A Sergi Quintela le agradezco su trabajo y su profesionalidad aquí, y le deseo lo mejor en el Obradoiro»

El foco de la actualidad breoganista estuvo durante buena parte del verano sobre Sergi Quintela. El capitán, símbolo del Breo, no solo se acogió a su cláusula de salida, sino que además puso rumbo al Obradoiro, con el que existe una gran rivalidad.

—De las bajas sufridas a final de temporada, la más sorprendente fue la de Sergi Quintela. Era mucho más que un jugador de la plantilla.

—Cada uno de nosotros siempre busca un lugar en el que cree que puede estar mejor. Yo solo puedo agradecerle su profesionalidad, su trabajo y todo lo que ha aportado en el tiempo que ha estado conmigo.

—¿Cómo era su relación con él?

—La misma que con el resto de jugadores. La relación habitual entre un entrenador y un jugador.

—Sorprendió su marcha, pero todavía más que su destino fuera el Obradoiro.

—Como he dicho antes, cada uno es libre de fichar por el equipo que quiere y donde cree que va a estar mejor.

—¿Qué futuro le augura en el conjunto santiagués?

—Le deseo todo lo mejor.

«¿Dirigir a un grande? Estoy en un club pequeño, pero con un corazón muy grande»

El estratega croata es un hombre feliz en Lugo y en el Breo, adonde llegó en enero del 2022 como relevo de Paco Olmos.

—Llegó para unos meses y ya son cuatro temporadas en el banquillo del Pazo. ¿Qué es lo que tanto le seduce de Lugo y del Breogán?

—Tengo la suerte de estar en el club que es el emblema de esta ciudad. Lugo es una ciudad de baloncesto y el 5 % de su población viene al Pazo para ver a su Breogán. Estoy en un club pequeño en España, pero con un corazón muy grande y con muy buena gente, trabajadora. El público ve al equipo y a los entrenadores en la pista, pero realmente no es consciente de todo el trabajo que hay detrás. Hay muchas personas que hacen todo lo posible para que nosotros estemos cómodos y podamos dar el 100 %,.

—Después de todo lo vivido el curso pasado, ¿tuvo dudas si seguir o no aquí?

—No, ninguna.

—Esta temporada, si nada lo impide, se convertirá en el segundo entrenador con más partidos del Breogán en la ACB.

—Es motivo de orgullo, me hace sentir bien.

—Si le dicen esto en enero del 2022...

—Esto es deporte, el futuro es impredecible. Lo que hoy vale, en diez días se vuelve inservible.

—Su cotización se ha multiplicado desde su regreso a la ACB. ¿Siente que su ciclo en Lugo está a punto de terminar?

—Decía Johan Cruyff que después de cuatro años hay que cambiar el entrenador o los jugadores. Nosotros cambiamos casi todos los jugadores cada temporada (risas),

—¿Su meta es el banquillo de un equipo grande?

—Hablemos del presente, mejor no soñar.

«Confío en que EJ Onu acabe siendo un buen refuerzo»

Un verano más, al Río Breogán le ha tocado reinventarse y levantar un nuevo proyecto deportivo prácticamente desde cero. Toni Nakic, Jordan Sakho y Erik Quintela son los únicos jugadores que permanecen una plantilla a la que llegaron nueve efectivos nuevos, todos ellos del agrado del entrenador.

—Charlie Moore

—Un jugador con mucho talento que tiene mucho margen de mejor. Lo veremos en un equipo top en un futuro.

—Darrun Hilliard.

—Experiencia. Ha pasado por muchos clubes de la élite europea y ahora ha decidido dar un par de pasos atrás. Ojalá pueda volver a jugar en un gran club.

—Edin Atic.

—Mucho talento. Lo hemos fichado en un momento en el que estaba un poco perdido, vamos a decirlo así, pero creemos que nos puede dar mucho y que puede llegar más arriba.

—Dragan Apic.

—Un guerrero. Un jugador con experiencia que nos va a dar estabilidad.

—Aleksandar Aranitovic.

—Parecido a Atic. Cuando era más joven había unas expectativas grandes con él, pero tuvo dos operaciones en las rodillas y eso frenó su carrera. En los dos últimos años en la Cibona dio un paso grande adelante y tenemos muchas esperanzas depositadas en él.

—Jordan Davis.

—Ya conoce la ACB de su paso por Manresa y Murcia. Un jugador muy explosivo, diferente a otros que tenemos. Puede brillar en algunos momentos y también tiene mucho margen de mejora.

—Eric Vila.

—Un jugador que hace tres, cuatro o cinco años era de los mejores jóvenes en España. Otro con mucho margen de mejora.

—EJ Onu.

—No es joven, pero sí inexperto en el baloncesto europeo. El año pasado, en Alemania, vivió su primera experiencia. Un jugador atlético que confío que acabe siendo un buen refuerzo. No sé cuál será su reacción en los momentos difíciles, si le van a motivar para seguir trabajando o le van a desmotivar.

—Adam Somogyi.

—En la pretemporada no lo hemos podido ver mucho. Entrenó cinco o seis días y se lesionó. Otro chico joven que está buscando su sitio en el baloncesto.

—Erik Quintela está lesionado y se perderá el partido en Bilbao. ¿Contemplan la posibilidad de mantener en el equipo a alguno de los temporeros, Petar Aranitovic o Popovic?

—No podríamos inscribir a ninguno, ya que Erik es cupo y con solo tres cupos no podemos tener más que once jugadores. Nos los plantearíamos con algún problema de otro que no fuera cupo.

«No se recuerda nada igual a lo que estamos viviendo ahora en el Pazo»

—¿Real Madrid o Barcelona?

—Los dos son grandes. Quizás soy un poco más del Madrid porque allí jugó Drazen Petrovic, solo por eso.

—¿Disciplina o diálogo? ¿Qué es lo primero para Mrsic?

—Las dos cosas son muy importantes. Es muy importante que haya disciplina, pero los entrenadores debemos ser justos con todos los jugadores, tanto con el más joven como con el más veterano, y exigir más a los líderes del equipo. El diálogo también es muy necesario. Todos los jugadores necesitan un cariño, una buena palabra y un respeto, jueguen más o menos, pero siempre dentro de esas líneas, ni un paso atrás.

—Este año el derbi será con el Leyma Coruña. ¿Puede acusar un salto tan grande al haber renovado tantos jugadores que vienen de LEB?

—Tienen un entrenador muy bueno (Diego Epifanio) que ya ha vivido ascensos a la ACB con el Burgos, con el Breogán y ahora con el Leyma. Han confiado en gran parte de la plantilla del año pasado, con la renovación de ocho jugadores, y vamos a ver cómo responden. Seguro que no lo van a tener fácil, como nosotros tampoco, pero me gustado mucho cómo juegan, cómo se mueven... Juegan como un equipo y eso me gusta.

—En su etapa como jugador visitó el Pazo con el Unicaja. ¿Era entonces la misma caldera que ahora?

—No recuerdo que hubiera tanta gente. Quizás unos 2.500 o 3.000, pero muy fiel a su equipo. No se recuerda nada igual a lo que estamos viviendo ahora.

—Compartió vestuario con un grandes figuras del baloncesto balcánico. ¿A quienes se traería para el vestuario del Breogán?

—Buff, con tres me bastaría para ganar la Euroliga. Dazen Petrovic, Toni Kukoc y Dino Radja. Ganamos la Euroliga fácil (risas).

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