Sergi García: «Del Breo me atrae todo: la ciudad, el proyecto y, por supuesto, su afición»

FORZA BREO

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El nuevo jugador del Río Breogán desvela que hace unos meses ya estuvo a punto de jugar en el equipo lucense

22 jun 2022 . Actualizado a las 22:28 h.

Sergi García (Palma de Mallorca, 1997) está deseando venir a Lugo y comenzar a trabajar. Al otro lado del teléfono transmite ilusión, ganas y, sobre todo, un ferviente deseo de agradar y echar raíces en un Río Breogán al que ya estuvo a punto de incorporarse en el tramo final de esta última temporada.

—¿Por qué no siguió en el Gran Canaria?

—Llegué allí con un contrato de dos meses y siendo consciente de que cuando los lesionados se recuperasen era difícil que pudiera seguir. Y así fue. Pero lo cierto es que estuve bien allí. Fueron dos meses buenos.

—¿Cuándo disputó su último partido oficial?

—En febrero.

—¿Y cómo se mantiene en forma desde entonces?

—Nada más llegar a mi casa, en Mallorca, me puse a trabajar con un entrenador personal porque en cualquier momento podía surgir la posibilidad de fichar por otro equipo.

—¿Y le surgió?

—Sí. Tuve las maletas casi dentro del avión para irme a Lugo, pero el Gran Canaria no me había dado de baja dentro del plazo establecido, hubo problemas con mi fichaje y no podía jugar en otro equipo de la ACB.

—¿Eso cuando fue? Nada trascendió en su momento.

—No estoy seguro.

—¿Pudo ser tras la lesión de Bell-Haynes?

—No me acuerdo, de verdad.

—¿Qué le atrae de su nuevo equipo?

—Del Breo me atrae todo: la ciudad, el proyecto y, por supuesto, la afición. Estoy muy ilusionado y con muchas ganas de empezar. Intentaré ayudar en todo lo posible y crecer de la mano de este club, que creo que está haciendo muy bien las cosas. Se ve que Lugo es una ciudad de baloncesto y todo el mundo me dice que me sentiré como en casa y que me tratarán súper bien.

—¿Ha sufrido alguna vez al Pazo?

—Sí, sí, cuando era jugador del Valencia. Fue la temporada en la que descendieron. La trayectoria que seguían no era muy buena y el ambiente fue espectacular. Es una afición de 10.

—¿Ya ha tenido ocasión de hablar con Mrsic, su entrenador?

—Lo hice la anterior vez que estuve a punto de venir, en los últimos días no.

—¿Qué rol espera en Lugo?

—No sé si tendré un rol específico. El que me toque, lo aceptaré y haré todo lo posible para cumplir. Lo voy a dejar todo en la pista en cada partido y en cada entrenamiento. Es una buena oportunidad para demostrar el jugador que soy y creo que puedo aportar mucho al equipo. Las expectativas son muy buenas.

—Hollatz estará por delante. En principio le tocará pelear con Erik Quintela por ser el segundo base.

—Puede ser que esa sea la idea que tiene el club, pero las temporadas son largas y habrá oportunidades para todos.

—¿Se enfrentó a Hollatz en su paso por la liga alemana?

—Él era muy joven y no tengo recuerdos suyos, pero lo he seguido estos últimos años y ha tenido una evolución muy buena. Es un gran fichaje.

—Solo tiene 25 años y ya ha jugado en el Zaragoza, el Valencia, el Andorra, el Baskonia y el Manresa, además de en Alemania. ¿No le gusta acomodarse o no ha tenido oportunidad?

—Las cosas no siempre dependen solo de uno mismo. Las circunstancias me ha llevado de un sitio a otro durante estos años, no es que yo no quiera consolidarme en un equipo. En todos los equipos he estado bien, a gusto, y he jugado en competiciones importantes, pero es verdad que ahora tengo ganas de asentarme. No estaría mal echar raíces en Lugo y en el Breo.

«Me encantaría que el club pudiera jugar en Europa»

—¿Qué puede aportar Sergi García al Breogán?

—En todos los equipos he dado cosas diferentes. Anotación, defensa... Y creo que, a pesar de tener solo 25 años, también puedo aportar experiencia porque he jugado en muchos sitios y eso, para bien o para mal, te curte. Además, tuve como compañeros a muchos jugadores muy buenos y eso también me ayuda a afrontar este reto.

—¿Cuáles son sus mejores virtudes y sus grandes defectos?

—Ja, ja, ja... Soy un jugador de equipo, que hace equipo, al que no le importa aportar en aspectos que a los mejor a otros nos les gusta, como la defensa. Creo que también estoy capacitado para aportar en ataque. Soy un buen tirador y bastante polivalente en muchos aspectos.

—¿Cómo definiría la trayectoria del Breo en el último curso?

—Impresionante. Fue uno de los equipos de moda y gustaba verlo. Hubo un momento en el que parecía que se iba a deshinchar, por los contratiempos que sufrió, pero ahí siguieron. Fue alucinante ver a un equipo recién llegado de la LEB clasificarse para la Copa y salvarse con tanta solvencia.

—Será muy complicado vivir otra campaña como esa.

—Claro que sí. Todos los equipos se refuerzan, te van conociendo más, saben cómo juegas..., pero nada es imposible. Vamos a esperar a ver cómo nos reforzamos nosotros.

—No hay unanimidad sobre si el club debe aceptar o no la invitación para jugar en Europa. ¿Qué cree que le conviene?

—A mí me encantaría, la verdad, me encantaría que el club pudiera jugar en Europa porque los jugadores lo que queremos es jugar, cuantos más partidos mejor, pero entiendo que el club tenga que valorar todos los pros y los contras. En la Basketball Champions League te pueden tocar equipos que no juegan en ciudades importantes y los viajes son largos. Además, económicamente se nota.