Fin de fiesta y día de despedidas en el Pazo

Ignacio Meitín Buján
I. MEITÍN BUJÁN LUGO / LA VOZ

FORZA BREO

ALBERTO LÓPEZ

El Río Breogán cierra la temporada en casa con los deberes hechos y Musa de vuelta en la cancha ante un Unicaja que también expone solo orgullo

14 may 2022 . Actualizado a las 23:59 h.

Llegó el final. Será difícil ordenar las emociones en el último partido de la temporada del Río Breogán, este sábado en el Pazo ante el Unicaja (18.00 horas. Movistar Deportes). El regocijo por ver desde la distancia la angustiosa lucha por la supervivencia en la ACB en la última jornada y la euforia por el fin de fiesta se mezclarán con la nostalgia porque lo bueno se acaba y la pena por decir adiós a un buen puñado de jugadores. El conjunto breoganista baja el telón a un curso que no solo pasará a la historia por la clasificación para la Copa del Rey y su solvencia para defender la plaza en la mejor liga de Europa, sino también por otros sucesos como la espantada de Paco Olmos y los continuos parones y aplazamientos en la competición ocasionados por el covid. Y, cómo no, por el paso por Lugo de Dzanan Musa, la estrella celeste en el regreso a la Liga Endesa, que volverá a ponerse la capa de superhéroe en la despedida para recibir una última ovación del Pazo.

Solo un mes después de haber sido intervenido de una fractura en la laringe y con solo dos entrenamientos junto a sus compañeros, el exjugador de los Brooklyn Nets y el Anadolu Efes, entre otros, reaparecerá en el santuario breoganista en disposición de ayudar al equipo en la pista a lograr la decimosexta victoria de la temporada. «Conociéndole, querrá jugar los 40 minutos, pero no le voy a dejar. Seguro que lo dará todo», señaló su técnico, Veljko Mrsic, en la víspera de un encuentro que abre la jornada final y totalmente intrascendente a efectos clasificatorios. El orgullo es lo único que mueve a los locales, que acabarán undécimos, y a un Unicaja que será duodécimo y del que se esperaba mucho más en los albores del campeonato. «Parece que va a ver un partido All-Star, pero conociendo a su entrenador y que jugamos en casa, entre los dos vamos a intentar hacer un partido serio y con muchas ganas para ganar», precisó en su rueda de prensa el estratega breoganista, quien presume un «partido alegre» como broche a «una temporada muy larga y la mayor parte de la misma con mucho éxito» para su equipo.

Al tratarse de la última función de la temporada, la plantilla, a través de su entrenador, pidió un esfuerzo extra a su leal hinchada. «Nos gustaría que media hora antes del partido, cuando el equipo salga a la rueda del calentamiento, el Pazo esté lleno», dijo Mrsic, quien confirmó que Bell-Haynes también se vestirá de corto a pesar de que la lesión que arrastra desde hace semanas le impedirá jugar. Y concluyó diciendo: «Ellos llevan cinco partidos perdidos seguidos y seguro que también quieren acabar la temporada ganado. Son un equipo con mucho talento, que por algo no estaba jugando bien, y que tenía como deseo el play-off y no lo logrño, pero con jugadores que, si les dejas, te pueden hacer mucho daño. Para ganar debemos estar bien, repetir un partido como el del otro día con el Barcelona o en Gran Canaria».

Ibón Navarro debe lamentar la ausencia de Carlos Suárez

Salvo sorpresa, el Unicaja saltará al parqué del Pazo con la única ausencia de Carlos Suárez, lesionado. El escolta Francis Alonso, el alero Jonathan Barreiro y el ala-pívot estadounidense Tim Abromaitis ya jugaron algunos minutos en el encuentro de la pasada jornada contra el Baxi Manresa y estarán a las órdenes de un Ibón Navarro que ya está en conversaciones con el club para decidir su futuro, si bien indicó que esperará al lunes pata tratar el tema «de una forma más seria, oficial y definitiva».

Acerca de este último encuentro liguero del curso ante el Río Breogán, el preparador del conjunto malacitano reconoció que será «complicado» porque «la energía ahora mismo en el equipo no es buena, no es positiva y tampoco es ilusionante», si bien indicó que tratarán de «mostrar la mejor versión posible e intentar tener una despedida digna a nivel individual y la mejor a nivel colectivo».