Los lucenses sufrieron en los tres primeros cuartos y sentenciaron al Almansa en los 10 últimos minutos
10 abr 2021 . Actualizado a las 21:19 h.Lo esperado. El Río Breogán retoma el buen camino tras su paso por la cancha del Almansa, el colista de la segunda fase, al que se impuso por 68-81 para recuperar el liderato que había perdido de forma momentánea y esfumar parte de las dudas que había sembrado con dos derrotas consecutivas ante el TAU Castellón y el Alicante.
El primer cuarto discurrió entre las canastas de Cvetinovic para los anfitriones —anotó 11 de los 18 puntos de su equipo— y las de Kevin Larsen y Adam Sollazo para los de Lugo. El pívot danés y su compañero asumieron la responsabilidad ofensiva, con 7 tantos cada uno, y fueron los artífices del primer demarraje del Breo (10-18), que perdió inspiración sin estos dos hombres y llegó al descanso con una exigua renta gracias a dos canastas consecutivas de Iván Cruz y una buena penetración de Mateo Díaz en la última jugada.
En el segundo cuarto no tardaría en ponerse de nuevo por delante el Almansa beneficiado por el paupérrimo porcentaje del Breogán en los tiros desde el perímetro, sobre todo desde el triple. Un parcial de 7-0 obligó a Epi a llamar a capítulo a sus hombres cuando restaban algo más de cinco minutos para el descanso. Pero lejos de reaccionar, los lucenses se atascaron todavía más y los locales tomaron una renta de 8 puntos que defendieron con una defensa pegajosa y de buenas ayudas cuando los rivales de más talento estaban en disposición de anotar. Tras 20 minutos, la sorpresa planeaba por el pabellón municipal de Almansa: 40-34.
El trámite empezó a enredarse seriamente para el Río Breogán en el arranque del tercer período, cuando el Almansa se fue hasta los nueve puntos de diferencia (46-37). Epi no tuvo más remedio que dar otro tirón de orejas a los suyos que, al contrario que el anterior, propició la reacción. Iván Cruz se hizo dueño y señor del poste bajo, junto al reaparecido Israel Gutiérrez, y con puntos y rebotes contribuyó en buena medida al parcial de 3-17 que devolvía la iniciativa a su equipo (40-50).
Hubo que esperar al último cuarto para comprobar la verdadera diferencia entre uno y otro equipo. Dos triples consecutivos de Kacinas y Salva Arco dispararon al Breo en el marcador y consumieron de manera casi definitiva el ímpetu y los ánimos de los manchegos.
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