El Xuven persigue en Vitoria un triunfo que le dé confianza de cara al derbi con el Marín

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

FIRMAS

Los de Casal, sin Emilio Oubiña, se enfrentan a un Araberri con el que comparten el perfil de jóvenes y sobradamente preparados. Control del rebote y blindaje de la línea de 3 en defensa, las claves del técnico amarillo para ganar esta tarde

11 oct 2014 . Actualizado a las 04:56 h.

Primer desplazamiento de la temporada para el Xuven Cambados en la Liga de LEB Plata 2014/15. Y como buena parte de sus futuros viajes, de largo alcance, con algo más de 700 kilómetros hasta Vitoria, donde estaba previsto que el conjunto amarillo llegase ayer ya de noche en la víspera de su choque con el Sáenz Horeca Araberri (Mendizorroza, 18 horas).

Sin Emilio Oubiña, baja por el esguince de tobillo que sufrió durante el entrenamiento del pasado lunes, el conjunto que dirige Yago Casal busca su primera victoria de la temporada. Lo hace con la moral alta a pesar de su estreno con derrota, al haber sido de esas que dicen de dulce regusto en la boca, con un equipo modesto como el Xuven viéndose capaz de tutear a todo un vigente campeón y filial ACB, el C.B. Getafe, para acabar cayendo por un punto en un desafortunado final de partido.

En Mendizorroza pensar en una derrota dulce no es una opción. Al Xuven le toca comenzar en tierras vascas su Liga, la de los equipos obligados a exorcizar cuanto antes el fantasma del descenso a la EBA, y animar a sus respectivas aficiones a soñar con entrar en el play-off de ascenso junto a esa media docena de rivales con planteles y posibles por encima del común. Caprichos del calendario han querido además añadirle un plus al valor del triunfo hoy en juego en Vitoria para el Xuven. Llegar al primer derbi de la temporada con el Marín PeixeGalego, de aquí en 8 días en O Pombal, sin haber ganado elevaría en el conjunto cambadés un punto el grado de ansiedad que el partido en cuestión genera en ambos clubes y sus entornos desde que los dos equipos rivalizan por la hegemonía en el baloncesto pontevedrés.

El entrenador del Xuven aguarda que su colectivo tenga bien presente la lección emanada de su derrota ante el Getafe la pasada semana. Que la potencia, o el «buen esfuerzo» del que habla Casal, sin control no sirve de nada. En su caso, si «falta concentración en momentos puntuales», como en el tramo final del estreno liguero, con la consiguiente derrota.

Así las cosas, Casal pide «estar concentrados todos, los 40 minutos, para ganar partidos en esta Liga». Ante el Araberri, que la semana pasada debutaba ganando a Canarias 47-53, aplicándose especialmente en «controlar el rebote y los tiros de 3 puntos rivales».

Frente a frente, dos conjuntos similares, que repiten técnicos con plantillas profundamente renovadas sobre la base de jóvenes valores sobradamente preparados. En el caso del Araberri, incluídos tres jugadores vinculados del Laboral Kutxa, el alero gallego Carlos Martínez, el alero Tadas Sedekerskis y el cuatro Rinalds Malmanis. Este último, duda hoy como el veterano alero Álex Arcelus. Dos bases talentosos como Cuesta y Sastre, y dos pívots reboteadores y anotadores como Obade y Yates proporcionan al Araberri un notable equilibrio interior-exterior.