Tanto el presidente como la asesora económica de Aempe tienen claro qué contestar cuando se les pregunta qué pasos debe seguir un emprendedor antes de montar un negocio: buscar consejo profesional. «Que se ponga en manos de una asociación o profesional con quien se explaye y haga los ejercicios de análisis y autocrítica», recomienda José Corujo.
Evitar un cierre está, en parte, en manos de la propia marca, porque cuando cierra una franquicia es también un fracaso para la matriz y, si cierran varios negocios de un mismo grupo en Pontevedra, Vilagarcía y Vigo, estas clausuras perjudicarían la imagen de la marca, advierte el máximo responsable de la asociación de empresarios. De ahí que ciertas firmas, como McDonald?s, Brico King y otras similares, pongan muchas exigencias tanto en relación a la población cercana (piden un mínimo de habitantes) como a la competencia a la que se enfrenta.
Corujo recomienda, en este sentido, aplicar la denominada «estrategia Disney», llamada así por ser el proceso creativo utilizado por Walt Disney y sus colaboradores para desarrollar sus exitosos proyectos. Consta de tres fases: el soñador, el realista y el crítico. «Cada una de esta fases tiene un objetivo definido que sirve de base para la siguiente», señala.
Soñar, analizar y autocriticar
En la primera, el soñador, «se exponen todas las ideas que nos vengan a la mente, no importa cuan locas o imposibles sean. Aquí no existen la moral, la lógica o los puntos de vista. Todo es válido», explican. En este sentido, Corujo añade como una clave del éxito la innovación: «Puede haber muchas zapaterías o bares, pero si hago algo distinto, a lo mejor tengo éxito. No está todo inventado, están las estructuras, pero no la profesionalización».
La segunda es la fase del análisis, en la que «se plantean las ideas de la fase anterior y se descartan las que no sirvan al proyecto. Quizás sea necesario en algunos puntos volver a la fase anterior para modificar algunas ideas que no se adapten completamente al proyecto a realizar», aclara.
La autocrítica es la tercera y última, y sirve para evaluar «qué es lo que hace falta en nuestro proyecto y cuáles son los puntos de vista que no se tuvieron en cuenta. Esta fase sirve para descubrir las faltas de las etapas anteriores», concluye.