No todas las calles por las que discurre el día a día de los ourensanos son de propiedad municipal. La titularidad de muchas es de otras administraciones, responsables de su mantenimiento y conservación. Además de la Xunta y el Concello, la Diputación de Ourense y el Estado también son propietarias de viales. Las principales carreteras de acceso a la capital ourensana y que la conectan con el resto de municipios y provincias, son estatales. Desde el acceso centro, a la autovía de las Rías Baixas pasando por la N-120 que une Logroño y Vigo. También es del Estado la N-525 entre Zamora y Santiago, una vía secundaria muy utilizada por los ourensanos, y varios accesos a la N-120.
A la Diputación pertenecen las carreteras de Casilla a Barra de Miño, Velle a San Miguel do Campo, Rairo al Cumial, Quintela a Castro de Beiro, la de Cabeanca a Trasalba y la de Santa Cruz a Parada. También las vías que unen la capital con A Merca, Toén y Amoeiro.
La titularidad suscita muchas controversias al reclamar los vecinos su reparación. En la mayoría de los casos las denuncias llegan al Concello, al ser la administración más cercana. Los convenios que rigen la conservación y mantenimiento de estas calles, avenidas o travesías determina el responsable de su estado y el lugar al que el ciudadano debe enviar sus reclamaciones.