Razones de la marea blanca en Pontevedra

Victoria Gutiérrez

FIRMAS

15 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Un grupo de trabajadores sanitarios coincidimos en que es necesario mantener una continuidad en nuestras reivindicaciones porque existe un riesgo real de que la sanidad pública se privatice. Dado que llevamos toda la vida trabajando en y para el sistema público de salud, estamos viendo desde dentro los intentos continuados de privatizarlo (¡por favor! desterremos de una vez la palabra externalización). El gobierno de la Comunidad de Madrid intentó, en contra del criterio de la población, privatizar la gestión de ocho hospitales pagados por el erario público, para que unas cuantas empresas obtuvieran beneficios con el pretexto de una mejor gestión. Gracias a la contundente respuesta de ciudadanos y profesionales sanitarios, y después de meses de manifestaciones y varias denuncias, la justicia dictaminó que dicha privatización no era legal, dejándola en suspenso. Por el contrario en nuestra comunidad, y concretando, en Pontevedra, la privatización lleva caminos más sibilinos, eso sí, con el mismo fin. Hoy privatizamos el servicio de limpieza, mañana la lavandería, electromedicina, radioterapia, cirugía cardíaca? Ahora parece que le ha tocado el turno a esterilización, que ya se está realizando eficazmente por trabajadores públicos y con aparataje propio. ¿Para qué se lo damos a una empresa privada? Todos pensamos que la sanidad pública es mejorable y puede hacerse con el trabajo conjunto de Administración, trabajadores sanitarios y usuarios. Si estamos contentos con nuestro modelo sanitario peleemos por él. Peleemos por una sanidad ganada a pulso con el esfuerzo y el dinero de muchos años, y dejemos una buena herencia a las siguientes generaciones. Nos vemos los sábados, a las 12.30, en A Peregrina.