Air Nostrum suprimirá en abril el primer enlace matinal con Madrid
17 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La incertidumbre marca el inicio de un año que debe ser decisivo para que el aeropuerto compostelano consiga remontar el vuelo. A la pérdida de la mitad de conexiones con el extranjero en esta temporada de invierno y a la prolongación del recorte de viajeros en enero se suma la decisión de Air Nostrum de suprimir, a partir del 1 de abril, el primer vuelo de la mañana (6.30 horas) entre Lavacolla y Madrid. La medida, confirmada por la compañía, dejará a Santiago sin conexión aérea con Barajas hasta las 8 de la mañana, cuando parte el enlace de Ryanair. Esto causará contratiempos a muchos usuarios frecuentes del primer vuelo de Air Nostrum, que ahora se verán obligados a viajar la noche anterior si necesitan estar en Madrid a primera hora.
La desaparición de ese primer enlace coincidirá en abril con el incremento de una frecuencia diaria de Iberia Express entre Santiago y Madrid, dentro de una programación de verano (31 de marzo a 27 de octubre, dependiendo de las compañías) que traerá nuevas conexiones, pero también la reducción de enlaces y la salida de Lavacolla de Air Berlin y de Volotea. La implantación de la que será la cuarta frecuencia diaria de Iberia Express a Madrid se sumará a las nuevas conexiones que consolidarán a Lavacolla como el aeropuerto gallego de referencia para los enlaces internacionales. EasyJet ampliará esa oferta con la conexión con Londres que empezará a operar el 18 de junio. La aerolínea inglesa, que retomará también la conexión con Basilea, ofertará tres vuelos semanales (martes, jueves y sábado) al aeropuerto de Gatwick. De este modo, será posible viajar entre Santiago y Londres de lunes a sábado, ya que Ryanair dispone de enlaces a la terminal de Stansted los lunes, miércoles y viernes.
La baza de las rutas exteriores
La expansión internacional de Compostela tendrá otra baza de peso con la llegada de Turkish Airlines, que desde el 21 de mayo abrirá Lavacolla a los mercados ruso y asiático, de enorme potencial turístico, a través de la conexión con Estambul.
Con estas novedades, el aeropuerto de Santiago dispondrá en la temporada de verano de una decena de rutas exteriores directas: Londres, París, Fráncfort, Estambul, Dublín, Basilea, Zúrich, Ginebra, Milán y Caracas.
Menos alentadora es la anunciada reducción de frecuencias de Ryanair, que la aerolínea irlandesa de bajo coste ha justificado por la subida de las tasas. Desde el 30 de marzo, eliminará ocho frecuencias semanales con Madrid y cuatro con Barcelona. Aunque el verdadero golpe será la pérdida de las conexiones de Air Berlin con Palma de Mallorca, y de Volotea, que supondrá el adiós a los vuelos a Venecia, Ibiza y Menorca.
A la espera de ver los resultados, Lavacolla se mantendrá este año al margen del giro en la estrategia de la Xunta, que ha apostado por promocionar los aeropuertos de A Coruña y Vigo en los principales destinos. La idea es intentar llenar los aviones en las rutas existentes en lugar de captar enlaces nuevos a golpe de subvención. Santiago se incorporará el año que viene, cuando expire el contrato por el que la Administración subvenciona los vuelos de Ryanair.