«Es duro que el alcalde diga que no confía en ti sin conocerte»

Xosé Vázquez Gago
Xosé V. Gago A CORUÑA / LA VOZ

FIRMAS

PACO RODRÍGUEZ

Optará a la jefatura del cuerpo y confía en ser el elegido

10 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Sentado en una cafetería a cinco minutos del despacho frío, vacío y sin luz natural que ocupa en la estación de autobuses desde que fue cesado, el que fuera jefe de la Policía Local durante 14 años, Antonio Alfeirán, contesta a las preguntas frente a una Coca-Cola y reconoce que le gustaría volver a dirigir la guardia municipal. Es más, se muestra «optimista» ante la posibilidad de resultar elegido en el concurso abierto para optar a esa plaza, al fin y al cabo solo hay tres superintendentes en Galicia, pero uno está prejubilado y otro inmerso en un proceso judicial. De acuerdo a su «categoría y antigüedad», ninguno de los 2.600 agentes municipales de Galicia está por encima.

Hay precedentes en Noia, donde el alcalde apartó del mando al policía de más rango en el año 2009 y la Xunta, desde la consellería de Alfonso Rueda, le obligó a rectificar. Esa decisión fue apoyada por los sindicatos y numerosos jefes de policía, entre ellos José Antonio Brandariz, que dirigía la guardia municipal de Ribeira antes de llegar a A Coruña para sustituir, precisamente, a Alberto Alfeirán.

Alfeirán no duda en que desde ese puesto trabajaría a gusto para Carlos Negreira, el alcalde que le destituyó justo antes de la primavera del 2012: «Me encanta mi trabajo y siempre he sido y seré leal al gobierno municipal». Reconoce que «es duro para un funcionario que tu alcalde te diga que no confía en ti sin conocerte», pero no guarda rencor: «Entiendo que lo hiciese (destituirle) para apoyar al que era el hombre fuerte en seguridad en ese momento».

La relación con Germán Lago

Ese «hombre fuerte» era Germán Lago, que fue cesado de forma fulminante el mes pasado de su cargo de director municipal de Seguridad. Fue sustituido por Carlos Touriñán, que «conoce y comprende mi situación», afirma Alfeirán, quien tiene la esperanza de que el gobierno «tenga un conocimiento más preciso de mi trayectoria y mi trabajo» a través de él.

Alfeirán también se sincera sobre su relación con Lago, y pronto queda claro que era mala: «Estoy concretando una denuncia penal por acoso contra él y quizá no sea la única». La presentará cuando finalice el pleito que ha presentado por su «apartamiento de la policía y del puesto de superintendente».

Alfeirán culpa a Lago de que esa decisión del gobierno. «Intentó forzar continuamente mi cese», explica. Recuerda que él y Touriñán sortearon juntos «muchas maniobras de acoso y persecución» del ex director durante los últimos cinco años.

Lago, según explica, incluso «impidió que el gobierno me diera la medalla al mérito civil».

También duda de la pericia del ex director: «No sabía nada de las competencias policiales en seguridad vial ni le importaban», «tuvo problemas con los funcionarios de todos los departamentos», «desconocía la gestión municipal» y recuerda el gran descontento que provocó en el cuerpo que «no propusiese a ningún mando de la Policía local para una medalla por el dispositivo posterior a la tragedia del Orzán, pero sí se autopropusiese para que se la otorgarán a él». Está seguro Alfeirán de que el actual gobierno tomó una «buena decisión» al cesar a Lago y nombrar en su lugar a Carlos Touriñán, «que tiene un gran trabajo por delante». Una labor en la que le gustaría colaborar desde la jefatura del cuerpo municipal.

Antonio Alfeirán Exjefe de la Policía Local