De vinos con el futuro enemigo

Jorge Lamas Dono
jorge lamas VIGO / LA VOZ

FIRMAS

Cuatro marinos británicos y tres alemanes forjaron en Vigo una amistad imposible meses antes del enfrentarse en la Gran Guerra

05 feb 2013 . Actualizado a las 06:00 h.

Se veían todos los días en la oficina de Correos. «Algunas veces, para hacer más llevaderos los minutos que el apartado de la correspondencia les hacía esperar, visitaban cierto establecimiento próximo, en el cual certificaban, con pruebas, la bondad de los caldos vínicos que produce la región gallega». Avelino Rodríguez Elías recuperó esta historia dos años después en el periódico La Acción. El periodista y cronista de la ciudad se refería a los siete cabos-carteros de los buques británicos y alemanes, que coincidieron durante varios días en la bahía de Vigo, a finales de febrero de 1914, seis meses antes del inicio de la Primera Guerra Mundial.

El crucero alemán SMS Victoria Louise fue el primero en fondear en la ría, el 19 de febrero de 1914. Al día siguiente, llegaron varias unidades de la Home Fleet, entre ellas el buque insignia HMS Lion, mandado por el contraalmirante Beatty, futuro vencedor de la batalla de Jutlandia. Días después, echaron sus anclas los cruceros germanos SMS Hansa, SMS Vineta y SMS Hertha.

Los cabos-carteros de estas embarcaciones acudían a la ofician de Correos, entonces situada en Velázquez Moreno. Coincidían regularmente a las horas de llegada de la correspondencia. «Marinos todos y por ende primos, en el buen sentido de la palabra, como son los hijos de la rubia Albión y los de la activa Germania, pronto se hicieron amigos», escribió el cronista.

«Un día nació entre ellos la idea de conservar un recuerdo de aquellos días de ?camaradaje? y, sin más pensarlo, se dirigieron a la fotografía de los señores Pacheco y viuda de Prósperi, donde se hicieron retratar los siete cabos-carteros», se puede leer en La Acción del 2 de abril de 1916. Explica Rodríguez Elías que los ingleses pertenecían a las armas de artillería e infantería de Marina.

Los buques fueron zarpando escalonadamente hasta mediados de marzo, y los amigos, despidiéndose «mientras las cancillerías preparaban la tremenda conflagración que había de hacerles enemigos dentro de pocos meses». El 28 de junio tenía lugar el atentado de Sarajevo y tras él comenzaba la primera conflagración mundial. Tras dos años de guerra y millones de muertos, Avelino Rodríguez Elías se preguntaba qué habría sido de aquellos amigos. «¿Habrá querido el destino que los tres marinos alemanes y los cuatro ingleses ahí retratados se hayan encontrado algún día frente a frente, para destruirse por el honor de su patria respectiva, como en aquellos otros días, ya lejanos, cuando se encontraban en las oficinas postales de Vigo y se estrechaban calurosamente la mano? ¿Existirán todavía los siete marinos? ¿Habrá perecido alguno, víctima del hierro de sus antiguos amigos?», se preguntaba el periodista.

El cartero del HMS Queen Mary sabemos que murió porque fue hundido el buque durante la batalla de Jutlandia, pero nada sabemos del resto. Los carteros de los navíos alemanes fueron destinados, al comenzar la guerra, a otras unidades porque el SMS Hansa, SMS Vineta y SMS Hertha estaban en tan mal estado que fueron reconvertidos en barracones flotantes. El HMS Lion, HMS Princess Royal y HMS New Zealand también participaron en el combate pero salieron victoriosos. «Terminará la guerra y aquellos amigos retratados en Vigo guardarán, sin duda, como un lejano recuerdo esa fotografía», concluyó Avelino Rodríguez

eran otros tiempos febRerO 1914