Los planes de empleo del Concello vigués están en el punto de mira de Esquerda Unida, grupo político al que un puñado de votos dejó fuera de la corporación. Ya los ha criticado con anterioridad y lo ha vuelto a hacer con motivo de la aprobación de los presupuestos municipales.
«PSOE e BNG deberían realizar plans de emprego de verdade, auditados dende a contratación pública». Por ello reta al gobierno local «a que demostre que os contratos que remiten os beneficiarios dos convenios asinados polo Concello corresponden a convenios feitos con oferta previa, igualdade e publicidade.
El máximo responsable de EU, Rubén López, asegura que se trata de «un feito de extrema gravedade que levamos anos denunciando». Sin pelos en la lengua, asegura este partido que «os orzamentos de 2013 reafirman a práctica do clientelismo no Concello de vigo, en forma dun mal chamado plan de emprego sen control algún».
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Entiende que «a fórmula de contratación mediante asignación económica a asociacións non se corresponde ao modelo de contratación que ten que primar nun Concello que se diga progresista». EU defiende el uso de dinero público para empleo «pero en todos os concellos, incluso na orixe do plan de Vigo, o procedemento de contratación corría a cargo do Concello e a oferta de emprego aparecía na web municipal». Califica de preocupante que en la ciudad «miles de traballadores non podrán acceder a un emprego por non ter padriños e madriñas»
Si Esquerda Unida tuviera representación municipal hubiera votado no al presupuesto, según confirmó ayer mediante un comunicado. Este grupo político obtuvo 7.000 votos en las últimas elecciones locales (4,6 % del total). De haber alcanzado el 5 % tendría representación. Y no solo eso: la coalición que formó en las recientes autonómicas con Anova (escindidos del BNG encabezados por Beiras) se colocó en segundo lugar en Vigo y casi igualó al PSOE. Tanto, que de ser municipales habría logrado 6 concejales por 7 socialistas. Este panorama electoral convierte en relevante su opinión sobre la gestión municipal, y de manera especial por tratarse de un grupo de izquierdas.
Pese a ello, EU no presentó alegaciones oficiales al presupuesto, lo que provocó una alusión de la portavoz del BNG, Iolanda Veloso, quien manifestó su extrañeza por ello. En el comunicado de EU se califica de «estéril» redactar alegaciones oficiales «xa que son reiteradamente rexeitadas a pesar de consignar a posteriori as mesmas en forma de enmendas dos partidos aprobantes do orzamento».