«Decir que el timón era pequeño es insultar a los ingenieros del barco»
14 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Oteando el Atlántico desde el puente de los mercantes que capitaneó, pensó muchas veces en aquel lujoso trasatlántico sepultado a miles de metros en el fondo del océano que surcaba. El cedeirés José Antonio Bustabad, que a los 25 años era capitán de la Marina Mercante, pasó «no sé cuántas veces» por la ruta que hacía el Titanic. Cuando en la película de Cameron vio a un personaje diciendo que el timón del barco era pequeño este experto en peritaje de accidentes marítimos como el Mar Egeo o el Prestige se mostró sorprendido. Y es que «decir que el timón era pequeño es insultar a los ingenieros de un barco que hoy en día las sociedades de clasificación le autorizarían a navegar sin ningún problema».
-¿Por qué ese error?
-Sobre el Titanic se han venido haciendo muchas afirmaciones erróneas que un marino mercante ve enseguida; en este caso le echaron la culpa al timón porque la maniobra fue errónea.
-¿Qué pasó con la maniobra?
-La mala suerte hizo que al oficial William Murdoch se le ocurriera una de las maniobras más lentas e ineficaces de cuantas podrían ejecutarse, cuando la más segura, y que habría evitado la colisión, era meter todo el timón a babor, parar, dar atrás con la hélice de la misma banda y mantener igual las otras dos hélices. Con ello el barco empezaría a desviarse de la ruta y evitaría el iceberg. Lo que hizo fue dar atrás con las tres hélices y no le dio tiempo a parar.
-¿Iba demasiado rápido?
-Era el barco más grande y lujoso de su tiempo, pero no el más veloz. Su velocidad media era de 22,5 nudos, frente a los 26 del Mauretania y el Lusitania, de la naviera rival Cunard, que tenían una potencia de máquinas de 13.000 caballos superior a la del Titanic. También carece de fundamento técnico decir que navegaba a toda velocidad entre los hielos para conseguir el célebre Gallardete Azul (no existe la cinta azul que se dice a veces), la marca de la travesía más rápida del Atlántico norte que durante 22 años conservó el Mauretania. Nunca hubo esa competición.
-¿Sigue siendo la mayor tragedia marítima?
-Ese es otro de los errores, porque tanto en tiempos de paz como de guerra durante todo el siglo XX hubo varios siniestros, que luego cayeron en el olvido, con más de 1.500 muertos. Si se insiste tanto en el Titanic es porque se trataba del barco más lujoso, el de la mejor tecnología y, sobre todo, porque en la tragedia perdieron la vida algunas de las personas más ricas e influyentes de la sociedad inglesa y norteamericana. Es como si hoy en día fueran en el barco Bill Gates, Lady Gaga y gente de este tipo.
-¿Y la falsa chimenea?
-Las tres de proa eran para la salida de humos de los 159 hornos de las calderas y la de más a popa se utilizaba como sistema de ventilación de la sala de los motores alternativos, del motor de turbinas así como para la salida de gases de la cocina y otros compartimentos.
José antonio Bustabad marino mercante experto en el naufragio