Tres sorpresas en un congreso que arrancó en medio de una cierta polémica

La Voz

FIRMAS

22 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La militancia es lo que tiene. Que no perdona una, ni siquiera que un candidato llegue con cierto retraso.

-Llegas tarde.

-Es que estuve haciendo unas gestiones.

-Sí, pero llegas tarde.

Pese a lo que puede inferirse del breve diálogo con el que Gonzalo Caballero fue recibido en Pontevedra por un simpatizante socialista, lo cierto es que la hora y media de retraso con la que comenzó el congreso no fue, ni mucho menos, achacable a su persona.

El motivo fue otro. Y es que la cita arrancó con cierta polémica. La comisión de credenciales tuvo que lidiar con tres patatas calientes que motivaron que se ausentase el miembro de A Cañiza por desacuerdo con el enfoque que se estaba siguiendo.

De este modo, se rechazó que la agrupación de Crecente pudiese cambiar la persona que, en su día, fue elegida como delegado, mientras que en los casos de Tui y A Cañiza se descartó que pudiesen optar a disponer de dos representantes en lugar de uno como pretendían.

Solventados estos escollos, las sorpresas no tardaron en saltar. La primera la protagonizaron los disidentes de la ejecutiva de Modesto Pose, cuyos nombres no aparecían en ninguna de las listas. De hecho, ni siquiera el de Luis Gómez Piña, el que fuera número dos de Pose, quien parecía más cómodo moviendo hilos entre bastidores.

La segunda la protagonizó Modesto Pose, al ceder el testigo de liderar su candidatura a Abel Caballero, y la tercera... El propio secretario provincial del PSOE anunciando que no optaría a la reelección.