París y Berlín proponen un fondo para ayudar a crecer a los países rescatados

enrique müller BERLÍN / COLPISA

FIRMAS

20 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Las cartas están sobre la mesa y en la crucial partida de póker en la se juega el futuro del euro, la canciller Angela Merkel parece estar dispuesta a apostar, en medio de la crisis de la deuda soberana, a favor del poderoso eje franco alemán y arriesgar, al mismo tiempo, una peligrosa crisis en el seno de la coalición de Gobierno, donde el Partido Liberal se opone a apoyar la polémica tasa a las transacciones financieras si no entra en vigor en toda la Union Europea.

En un nuevo gesto de desprecio hacia su aliado liberal, la canciller autorizó el borrador de un plan de seis puntos que presentarán Berlín y París al presidente del Consejo de la Unión Europea, Herman van Rompuy, en la próxima cumbre comunitaria convocada para el 30 de enero. La nueva iniciativa franco-germana incluye medidas para reforzar el crecimiento, la creación de empleo y la competitividad en el continente. Incluso proponen la creación de un fondo para el crecimiento que en principio estaría destinado a estimular la actividad en Grecia, Portugal e Irlanda, los tres países que reciben asistencia financiera.

Fondo de rescate

Por otra parte, la UE reservará el fondo de rescate permanente (MEDE) a los países que ratifiquen el pacto fiscal y se comprometan a mantener el equilibrio presupuestario, como quería Alemania, según la última versión del borrador al que tuvo acceso Efe. Los países que incumplan el tratado podrán ser llevados ante el Tribunal de Justicia de la UE, que podrá imponer en última instancia una multa de hasta el 0,1 % del PIB del Estado afectado, que será abonada al MEDE. Solo será posible desvincularse de los compromisos adquiridos en «circunstancias excepcionales».