El mítico El Palmar reabrirá como Mare Nostrum con tres negocios diferenciados y el restaurante A Frouxeira suma un comedor más; todos los locales tienen amplias vistas al mar
03 jul 2021 . Actualizado a las 21:37 h.Las obras marchan a ritmo acelerado con la pretensión de que el arenal valdoviñés de A Frouxeira, punto de referencia de surfistas, veraneantes, turistas y bañistas, pueda ver ampliada su oferta de hostelería lo antes posible. Dos de los negocios asentados en primera línea de playa están apurando los trabajos de remodelación y reforma de sus respectivos locales, que, en base a las previsiones, sin duda supondrán un nuevo atractivo para la zona.
El proyecto que está más próximo de materializarse es el que corresponde al restaurante A Frouxeira, situado en la conocida como «playa pequeña», cuyos titulares prevén abrir en el plazo de quince días un nuevo comedor con capacidad para 180 comensales -esta cifra corresponde a ocupación total, sin la merma de mesas y sillas por las restricciones del covid-. El nuevo local, con la fachada totalmente acristalada, desde la que se domina todo el arenal de A Frouxeira, está ubicado en la primera planta del edificio cuyo bajo ya alberga la cafetería, otro comedor de 98 plazas y una amplia terraza con otras 64.
Según la información facilitada al respecto por los cuatro socios que regentan el restaurante A Frouxeira, el nuevo comedor dispondrá de una amplia cocina con parrillas, especializada en carnes y pescados a la brasa y arroces. Cuenta con un acceso a través de escaleras desde las actuales instalaciones, que continuarán activas, incluso la cocina de la planta baja, que se utilizará por las mañanas para la elaboración de los menús, y se ha dispuesto, asimismo, una entrada por la parte posterior del edificio para personas de movilidad reducida.
Los titulares del restaurante A Frouxeira decidieron dar el paso de habilitar un nuevo comedor para poder atender a la numerosa clientela, dado que, a pesar de que ya contaban con unas amplias instalaciones, las nuevas restricciones del covid les limitaban bastante el aforo. Además, tienen la ventaja de disponer de dos plantas superiores, de las que, ahora, solo van a utilizar una.
Y para finales de este mes está programada la reapertura del mítico restaurante El Palmar, con cerca de medio siglo de historia mirando al Atlántico en la entrada de la playa de A Frouxeira. El empresario naronés Luis Pernas y su esposa, Ana Plana Lorca, están sometiendo las instalaciones a un profunda reforma, que dará como resultado tres negocios diferenciados, que complementarán la oferta de hostelería en Valdoviño.
El nuevo establecimiento pasará a denominarse Mare Nostrum y contará con una cervecería-tapería y un restaurante en la planta en la que a lo largo de cerca de cincuenta años se celebraron bodas, bautizos, comuniones e infinidad de comidas familiares y de amigos, mientras que en el sótano, que también dispone de una fachada con vistas a la playa, se habilitará una hamburguesería-bocatería surfera.
Las obras del reforma del antiguo El Palmar incluyen la instalación de cristales panorámicos en torno el contorno del edificio que mira al mar para realzar la vista del impresionante panorama que ofrece el kilométrico arenal de A Frouxeira. Según explica Luis Pernas, también se han eliminado los pasillos cerrados que tenía el inmueble y se ha abierto la terraza hacia el interior, por lo que desde cualquier punto del nuevo local se puede ver el mar. Y para completar esa apertura, se ha instalado un novedoso sistema de puertas plegables.
La intervención incluye también la renovación de la pintura y la instalación de una nueva cocina a la vista, además de los aseos.
La puesta en marcha de este negocio implicará la contratación de cerca de veinte empleados. En la actualidad ya cuentan con un jefe de cocina y otro de sala y en breve sacarán una oferta para los camareros y los ayudantes de cocina. Luis Pernas asegura que se ha generado una gran expectativa respecto a la apertura del Mare Nostrum, hasta el punto de que ya tienen una reserva para 26 personas en una comida de empresa en el próximo mes de agosto. Este nuevo local triple ya no albergará los banquetes multitudinarios de antaño, pero sí está abierto a comuniones, bautizos y celebraciones de alrededor de una treintena de personas, respetando siempre las normas de seguridad en materia de prevención de contagios del coronavirus.