La Administración autonómica ha iniciado ya los trámites para licitar la mejora
11 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El último tramo del 2018 será decisivo para mejorar el estado de la autovía. La Xunta ha iniciado ya los trámites para licitar la mejora de los tramos de este vial que presentan mayores deficiencias. Puntos que se localizan precisamente en los trechos que soportan más cantidad de toneladas a diario.
En este sentido, la subida hacia As Pontes desde la ciudad naval concentra los principales problemas en lo que al pavimento se refiere. No en vano, operan unos 150 camiones trasladando la hulla desde la terminal descargadora de Endesa en el puerto exterior ferrolano y la central térmica. Un tráfico al que hay que sumar el generado por los polígonos de la zona, con Río do Pozo a la cabeza.
Según detallan desde la Xunta, el tramo que discurre por Narón -con una intensidad media diaria de 7.608, según el plan de aforos autonómico, y un porcentaje de camiones que ronda el 20 % del tráfico durante los días laborales- concentrará una parte importante de la inversión (unos 662.000 euros); seguido de los de San Sadurniño y As Pontes, donde se construirán cunetas de seguridad en el enlace de Penapurreira. Las obras previstas incluirán fresados localizados y reposición de los tramos que presentan deformaciones, la renovación de la señalización deteriorada, y la mejora del drenaje de la autovía en la zona de paso superior de la carretera de Vilallonte, en Sedes.
En paralelo a este proyecto que afecta a los 33 kilómetros que discurren por tierras coruñesas, se ultima la licitación de obras en viales de Lugo, entre ellas la AG-64, por valor de 795.000 euros.