El pequeño comercio busca su sitio, acuciado por las compras por Internet y las grandes áreas
PONTEDEUME
El sector se reivindica, por el servicio personal y directo que ofrece a los clientes y por la actividad que genera en villas como Pontedeume, Cedeira y Ortigueira
21 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.«O único que nos queda é o trato persoal, a cercanía e a atención aos clientes [...]. Ter os locais adecentados, as rúas limpas, decoradas e ben iluminadas, todo iso redunda nas ventas», defiende el presidente de la Unión de Comerciantes y Autónomos de Pontedeume (UCOA). Fernando Barallobre advierte de la competencia de las grandes superficies -«co factor do mal tempo, que prexudica aos pequenos e beneficia aos centros comerciais»- y la amenaza creciente del comercio electrónico -«non teño un estudo, pero estimo que se van por aí un 30 % das vendas»-.
«Isto empezou a ir abaixo a partir do 2008, coa crise, que supuxo un cambio de mentalidade e da forma de comprar», sostiene el empresario eumés. El sector no puede competir en precios, y mucho menos con las campañas casi continuas de descuentos, pero sí en servicio. «Nosotros solucionamos los problemas que le pueden surgir a un cliente personalmente, no a través de una máquina o dándote largas», recalca Francisco José Bouza, responsable de la Asociación de Comercio y Hostelería Ortegana (ACO). Y se apunta a la campaña «yo compro en el pequeño negocio del barrio», porque «fortalece lazos de la comunidad, el trato personal y cercano, es más sostenible y contribuye a humanizar las ciudades».
¿Y si las tiendas cerraran?
¿Qué ocurriría si los establecimientos comerciales y hosteleros de una villa como Ortigueira o Pontedeume cerraran? «Andar pola rúa metería medo», opina Barallobre. La misma sensación se produciría en Cedeira, otra villa con tradición comercial y que ahora comparte la lucha contra la caída demográfica, el envejecimiento de la población y las nuevas formas de consumo.
«El pequeño comercio genera negocio en el pueblo, y el negocio genera más negocio; es muy importante dejar el dinero en el pueblo porque lo movemos entre nosotros», mantiene Francisco Zaera, presidente en funciones del colectivo empresarial Casco Viejo de Cedeira. Incide en los puestos de trabajo y la actividad que genera el sector minorista, que lleva años buscando su sitio y ha encontrado «en un producto diferenciado y en el servicio» sus dos principales bazas.
Ante un panorama incierto, «só nos queda a unión e facer cousas para atraer á xente, que non se vaian de aquí», subraya el presidente de UCOA. El comercio de Ortigueira y Cariño tiene en marcha campañas para dinamizar las ventas en Navidad. Los pequeños tratan de ingeniárselas ante el desafío que supone comprar en un clic desde el móvil.