Ficción en tiempos del covid-19, a camino entre Cuba y Ortigueira

ANA F. CUBA ORTIGUEIRA / LA VOZ

ORTIGUEIRA

Parte de los integrantes del club de lectura en la primera reunión, en marzo
Parte de los integrantes del club de lectura en la primera reunión, en marzo CEDIDA

Los (12+1) miembros del club de lectura, que acaba de crearse, escribieron un relato encadenado en pleno confinamiento

20 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«O 7 de marzo do 2020, ás seis da tarde, un grupo de amigos e amigas, todos bos lectores, reunímonos na Perla para falar do libro de Antonio Rivera Losada Las montañas de la niebla, e dunha homenaxe que tiñamos pensado facerlle con motivo dos cen anos do seus nacemento en Mera, aínda que a idea principal era formar un club de lectura en Ortigueira. Asistimos 12 persoas e desculpamos a tres que tamén desexaban formar parte do club. Conxeniamos de camiño, non hai cousa que máis una que os libros». Es el arranque del prólogo de la primera obra literaria conjunta de los 12+1 (evitan el 13) orteganos que se apuntaron a esta iniciativa.

Ignoraban entonces que una semana después estarían confinados en sus casas y que no podrían asistir a su próxima reunión, el primer sábado del mes siguiente, para hablar del libro de Narciso Luaces Pardo O carreiro: memorias do tío Santos. Tampoco se imaginaban que aquel encierro forzoso se convertiría en un incentivo para lanzarse a escribir, sobre todo en algún caso, que, como cuenta la escritora Obdulia Dopico, reconocía no haber trazado ni un solo renglón desde los dictados del colegio.

Al poco de decretarse el estado de alarma, la delegación de Cultura del Concello de Ortigueira lanzó una convocatoria a través de Facebook, animando a los vecinos a plasmar sus vivencias de la reclusión debida al covid-19 en forma de dibujos, fotografías o narraciones. «Non había límite de idade nin outro requisito que nos impedise poñernos mans á obra, e no grupo de WhatsApp, no que eramos 12+1, acordamos argallar un relato en conxunto. Fixemos unha lista por orde alfabética e escribiriamos entre dez e vinte liñas cada un, que se irían enfiando para ter unha trama coherente, ata onde a imaxinación alcanzase», según explican en el texto introductorio.

Hilando la trama

A Dopico la dejaron para el final. A ella le correspondió la tarea de «hilar» los fragmentos que iban enviando los demás, no siempre en el plazo fijado, porque la vida y las obligaciones seguían, pese al confinamiento. «Fue una experiencia preciosa, nos estaba tardando leer lo que ponían unos y otros», destaca esta maestra jubilada, entusiasta de la vida y de la literatura. Durante varias semanas vivieron enfrascados en una historia de gallegos y cubanos, que los obligó a documentarse, con personajes como Crisanto, nacido en 1918, que emigró a Cuba en el 36, o Cosme, su hijo, que con 13 años viajó por primera vez a la isla; o la joven Yumara, cubana del 2002 que vive con su abuelo en Miñaño (Ortigueira).

Alguno se les resistió, como Flora, que unos daban por viva cuando ya otro había decidido su muerte en un capítulo anterior. Rosa Loureiro se ocupó de normativizar el texto, en gallego. El resultado lo han entregado en el Concello, con la esperanza de que se divulgue y llegue incluso a editarse. Son 134 páginas, ilustradas con mimo, y estos son los autores: Manuel Bouzamayor Riola, Victoria Díaz Castañeira, Carmen Durán Fernández, Carmen García Martínez, Marta Lamigueiro Durán, Elías López Pernas, Rosa María Loureiro Redondo, Ángel Muíño Blanco, Vicente Pérez Blanco, David Rodríguez Morado, Cruz Sabio Teijeiro, Fina Villasuso Salas y Obdulia Dopico Cachán. El título: Covid-19.