«Aquí entra agua por todos lados»

ANA F. CUBA ORTIGUEIRA

ORTIGUEIRA

I. F.

La lluvia caída en las últimas semanas ha acelerado el deterioro de la biblioteca municipal de Ortigueira, con goteras y humedades que afectan a todo el inmueble

14 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Aquí entra agua por todos lados», comentaba ayer un socio de la Biblioteca Municipal Juan Fernández Latorre tras devolver un libro. El agua se filtra por las juntas, las cornisas, los canalones interiores y algunas ventanas, acelerando el deterioro del edificio. Con la humedad los desconchones de pintura en las paredes se hacen aún más evidentes, en la entrada, en la sala infantil y en la de reuniones, en la hemeroteca o en la recepción. La chapa que recubre algunas zonas hincha y se rompe, y el olor a humedad se percibe ya en prácticamente todo el inmueble.

La biblioteca municipal se inauguró en el año 2004, en enero la planta alta y en diciembre, la baja. Las deficiencias del sistema de aislamiento se observan en las ventanas de las salas infantiles y de reuniones, o en la hemeroteca. Hace tiempo que la reforma integral del centro es urgente y que se anuncian mejoras que no acaban de materializarse. El alcalde, el socialista Juan Penabad Muras, firmó el martes el anuncio de licitación de las obras de reparación de la cubierta, que se sufragarán con cargo al Plan de Obras e Servizos (POS+) de la Diputación de 2019, por 40.000 euros. La contratación se realizará «por procedimiento abierto simplificado».

En el pleno municipal de la semana que viene se abordará la inclusión del proyecto genérico «Obras de reparación en la biblioteca municipal» en el POS de 2020. Se trata de una actuación presupuestada en 210.902 euros, que contempla una mejora de la impermeabilización de la cubierta en la zona de la primera planta y el bajo, «tanto de los faldones como de la parte superior de los muros, mediante chapa metálica prácticamente imperceptible desde la visión frontal», según indican desde el Concello.

Este proyecto prevé renovar el sistema de evacuación de aguas pluviales y retirar las ventanas de la cubierta. «No son originales del edificio, sino que se abrieron en la época en que se utilizó el espacio bajocubierta para oficinas. Hoy no existe esa planta y causan filtraciones por deficiencias [en las juntas]», explican. Las filtraciones de agua han dañado las carpinterías y esta intervención incluye la reparación y la eliminación del panelado de los paramentos interiores, sustituyéndolo, en algunos puntos, «por otro ventilado», y pintando el resto de la superficie.

El Concello proyecta ahora invertir 210.000 euros del POS+ 2020 en reparar el inmueble

La obra también afectará a las barandillas de la fachada principal y a la puerta de entrada, «que se acuchillarán y barnizarán». Además de sustituir por zócalos de madera de la planta baja por otros de granito. En los baños del bajo, cerrados desde hace más de un año (salvo el de personas con discapacidad) por el pésimo estado, y una zona de los aseos del primero se alicatarán las paredes. Las pinturas y los barnices de los suelos se renovarán.

«Fagan o que fagan, para este inverno xa non ten amaño e isto vén de hai moito tempo», remarcaba ayer una vecina, que lleva muchas tardes a su hijo a la biblioteca. El antiguo escolar agoniza, pese a la intensa actividad desplegada a diario en su interior.