Loiba salta al otro lado del Atlántico

ana f. cuba ORTIGUEIRA

ORTIGUEIRA

PACO RODRÍGUEZ

La firma de moda y calzado fundada por el ortegano Francisco Maragoto redobla su apuesta por la internacionalización y pelea por abrir mercado en México y Chile

16 dic 2018 . Actualizado a las 21:58 h.

¿Cómo va la empresa? «Trabajando como leones». Francisco Maragoto (Loiba-Ortigueira, 1966), fundador de la firma de moda textil -representa el 90 % de la colección, diseñada por Mónica Fuentes- y calzado Loiba, ilustra así el balance de 2018, un año de transformación para la marca, por su alianza con José Sáenz, fabricante de calzado de Arnedo (La Rioja). «Unimos las dos empresas manteniendo las dos identidades. José [Sáenz] entró en la sociedad y eso nos ha proporcionado una idea clara de internacionalización y de prestigio. Y en eso estamos, apostando muchísimo por los mercados exteriores, sin dejar de lado España», desgrana este ortegano, desde la sede de la firma en Bertamiráns.

Loiba echó a andar a comienzos de esta década, sobre bailarinas, las loibas, un homenaje al abuelo Antonio, «o zapateiro de Loiba», que falleció en agosto a los 94 años. «Me moriré con su recuerdo, dicen que me parezco mucho a él, en emprender y tirar para delante», comenta el nieto, recién llegado de México, donde han empezado a trabajar «con un importador muy fuerte, que cubre todo el país». Chile será el siguiente objetivo latinoamericano, sin dejar de lado Francia y Holanda, donde ya operan; con un ojo en Dinamarca y la mirada puesta en la feria de moda de mujer de Birmingham, en el mes de enero. La aventura empresarial requiere una pizca, o tal vez toneladas, de locura. «Es muy difícil, pero lo fácil no suele ser rentable -sostiene-. El problema es atreverse, tener la voluntad y las ganas de aguantar el riesgo y las noches sin dormir, porque es una inversión muy fuerte».

El lema «alma gallega», con el que nació Loiba, pervive. «Todo lo fabricamos aquí, en Santiago, y lo primero que tienes que saber si fabricas aquí es que no podrás competir con las multinacionales; la estrategia de venta ha de ser diferente, apostando por una línea de mucha calidad y un diseño distinto, un producto hecho aquí, con manos de aquí y que tiene vida aquí [...]. No podemos jugar a barato, porque nos pasarían por todos lados».

Maragoto regresó hace unos días a Ortegal y volvió a subirse al escenario, en el 30 aniversario de la banda de rock Punta Norte (O Barqueiro), de la que fue cantante, el primero, con solo 21 años, y compositor. «Hay que estar un poco loco, ya de chaval».

«Si fabricas aquí ha de ser producto de mucha calidad y diseño distinto, si juegas a barato no puedes competir»