Campo culpa a Muras del cierre del náutico y reivindica la colaboración del club con el Concello

A. F. C. ORTIGUEIRA / LA VOZ

ORTIGUEIRA

CESAR TOIMIL

El exalcalde y ex vicepresidente del disuelto club náutico asegura que desconocía que el Ayuntamiento pagara los gastos de luz del puerto deportivo

10 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El exalcalde de Ortigueira Antonio Campo -presidente del primer club náutico, constituido en los años 90, en torno al pantalán montado frente a la vieja discoteca- responsabiliza al actual regidor, el socialista Juan P. Muras, de la desaparición del club, tras el rescate de la concesión del muelle deportivo por parte de Portos de Galicia, como consecuencia de la deuda acumulada. «Desde que llegó al Ayuntamiento no ha firmado ni un solo convenio con el club náutico, que recibía entre 10.000 y 20.000 euros al año», asegura Campo, vicepresidente de la entidad cuando se disolvió, «hace siete u ocho meses».

Campo reivindica la colaboración del club náutico con el Concello y quiere dejar claro que los convenios suscritos anualmente entre ambos, hasta la llegada del gobierno socialista, establecían contraprestaciones por parte de la entidad deportiva a cambio de la aportación económica municipal. «El aparcamiento formaba parte de la concesión de Portos y el club se lo cedía al Ayuntamiento en las fiestas patronales, el Festival Celta y siempre que lo necesitaba; en el náutico se guardaban las lanchas neumáticas de Protección Civil y de los vigilantes de las playas; y el náutico colocaba las barreras en las playas y llevaba a gente en su embarcación. Durante los cuatro días del Festival Celta, el náutico también le cedía al Ayuntamiento la cafetería, que construyó el club, como concesionario, a través de un convenio a tres, con Portos de Galicia y el Ayuntamiento, que nos hizo los proyectos», remarca.

Afirma que el club organizaba actividades náuticas para los niños, además de «tener cedido al Ayuntamiento el pantalán que había frente a la discoteca [la instalación pertenecía al club] y que este alcalde se empeñó en quitar porque le molestaba». Desmiente, por otro lado, que el Concello organizara una fiesta popular en 2001, por el puerto deportivo. «Fue una inauguración, como la del polígono, el centro escolar, la biblioteca y tantas obras que se hicieron entonces. Entre la depuradora de aguas pluviales y residuales y el puerto deportivo la inversión era de seis millones de euros. ¡A ver qué obras ha hecho Muras! Y las fiestas que hice las pagué yo, alguna con ayuda de más empresarios, pero nunca el Concello», subraya.

Los gastos de electricidad

En cuanto a los gastos del suministro eléctrico del puerto deportivo, que, según Muras, ha estado pagando el Concello, Campo se muestra contundente: «No tenía ni idea y Girón [exregidor y actual portavoz municipal del PP] tampoco, pero es que este [Muras] tardó más de dos años en darse cuenta [...]. Yo no era consciente y si lo hubiera sido y hubiera tenido mala fe, podríamos haberlo metido en un convenio, pero ni cuenta me di... Y al restaurante, aunque no le cobres la luz, tampoco pasa nada, porque es una ventaja para el Ayuntamiento, porque al final todo está cerrando y hay que ayudar al pueblo para que resurja, ha habido un bajón enorme, sin empleo, ni empresas, ni actividad». En todo caso, respecto al consumo en electricidad, Campo sostiene que «es a Portos a quien le corresponde pagar la luz, no al concesionario, es un tema a negociar entre las instituciones».

Campo culpa a Muras del cierre del náutico, «igual que del Museo Ortegalia, con el empleo que se perdió». E insiste en que «el puerto deportivo iba mal porque era deficitario, los amarres eran el doble de caros que en A Coruña... Porque en este pueblo no hay posibilidad humana de ganar dinero sin ayudas... Y entre las instituciones tiene que haber colaboración».