La avispa velutina se hace fuerte en la comarca

ANA F. CUBA FERROL / LA VOZ

ORTIGUEIRA

CEDIDA

En muchos concellos, el número de nidos se ha duplicado respecto al año pasado

10 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La Vespa velutina nigrithorax se ha hecho fuerte en las comarcas de Ferrolterra, Eume y Ortegal, y prolifera con un crecimiento exponencial. Las cifras proporcionadas por el Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de Ortigueira certifican la expansión de la plaga. De los 167 avisos recibidos del 1 de enero al 9 de agosto de 2016, se ha pasado a 349 en el mismo período de este año. Las notificaciones por la presencia de colonias de avispa asiática se han duplicado en la zona que abarca el grupo liderado por Jaime Villar. De hecho, sostiene que solo el municipio de Ortigueira, con 188 avisos desde comienzos de año, requeriría un equipo en exclusiva a eliminar nidos. Cariño, Cerdido, Moeche, As Somozas y Mañón necesitarían otra brigada.

Los números resultan igualmente alarmantes en otras zonas. Al GES de Mugardos le han llegado 330 avisos por enjambres de velutina en lo que va de ejercicio, la mayor parte (270) desde abril, repartidos entre el municipio mugardés, Fene y Neda. En Ares, Cabanas, Valdoviño o Cedeira, de la destrucción de nidos se ocupan las agrupaciones de voluntarios de Protección Civil.

Cinco o seis al día

La media diaria de alertas oscila entre cinco y seis, pero hay jornadas en las que se superan la decena y la lista de espera engorda. «Aunque retires cinco en una tarde-noche, es imposible ponerte al día y siempre vas arrastrando trabajo pendiente», constatan desde el GES de Mugardos. Los Bomberos de Ferrol reconocen la demora. «Es irremediable, porque tenemos entre cuatro y cinco llamadas al día, tanto de la zona rural como del centro, y muchos quedan sin hacer», señalan. «Con estas cifras es imposible cumplir con los ciudadanos, sobre todo cuando la dedicación no es exclusiva al control de la plaga, sino que tenemos que atender, además, a las emergencias [accidentes, incendios urbanos y forestales, etcétera]. Si un día no puedes sacar nidos, ya es imposible actualizarse», ahonda el responsable del GES de Ortigueira.

Ni el personal ni los medios disponibles bastan para eliminar la cantidad de avisperos detectados en la comarca. «Eu non entendo que fai Tragsa, a empresa que en teoría se tiña que ocupar disto; deixan todo o traballo para os de emerxencias de aquí e non dan abasto», critica un ortegano, que lleva semanas esperando a que alguien destruya un nido próximo. La situación se presta a cierta picaresca y hay quien, para conseguir una intervención rápida, esgrime una alergia ficticia. De ahí que algunos de los encargados de esta tarea hayan empezado a pedir certificados médicos que acrediten tal condición. «Pagan justos por pecadores», lamenta un profesional.

Y es que hay familias que llevan más de dos meses a la espera de que se fumiguen avisperos situados al pie de sus casas, como denunció recientemente el concejal de San Sadurniño Manuel Varela. Este Concello ha optado por adquirir un equipo, que presta a los vecinos que lo soliciten, baja su responsabilidad, para eliminar colonias de este insecto.

Una invasión esperada

A Rafael Díaz, delegado de la Asociación Galega de Apicultura (AGA) en Ferrolterra, la expansión de la Vespa velutina nigrithorax no le ha sorprendido. «Se esperaba, el primer año sacamos ocho nidos; el segundo, 350; y el año pasado, hubo concellos con 850. Si se hubieran tomado medidas de prevención, como propusimos en su día a la mancomunidad, habría menos problemas, pero así, la gente nos llama desesperada porque no le van y nosotros tenemos la capacidad limitada y no estamos para esto».