«El surf gallego va por buen camino»

ANA F. CUBA ORTIGUEIRA / LA VOZ

ORTIGUEIRA

«Desde que recuerdo, en verano siempre he utilizado cualquier cosa para deslizarme por las olas», afirma.
«Desde que recuerdo, en verano siempre he utilizado cualquier cosa para deslizarme por las olas», afirma.

Pablo Maciñeira regresa a Espasante, tras años cogiendo olas por el mundo, para montar una escuela de surf

18 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Pablo Maciñeira López se identifica con dos pueblos, aunque se considera «un poco más de Espasante [allí vive su familia paterna] que de Ortigueira [sus raíces maternas]». Tiene 25 años, se graduó en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte en la especialidad de surf y está acabando el máster en formación del profesorado de Secundaria en la Universidade de A Coruña, donde reside. Desde los 16 años, cuando empezó a trabajar de monitor en la playa de Barrañán (Arteixo), ha impartido clases de surf. «He colaborado con varias escuelas y he trabajado varios años en el Raz Surf Camp, en la playa de Razo [Carballo], y en Blue Surf, que da clases en la costa de Arteixo y Oleiros», cuenta.

-¿Cómo se inició en el surf?

-Desde que tengo recuerdos, en verano siempre he utilizado cualquier cosa para deslizarme por las olas y, cuando no, utilizaba mi propio cuerpo. En el verano del 2000 me regalaron una tabla de surf australiana, muy vieja, y hasta hoy he seguido disfrutando de esta maravillosa sensación.

-No tardó en empezar a viajar.

-El primer viaje importante fue como estudiante, a Isla Reunión (Francia), en el océano Índico, en un curso académico. Fue un chute de conocimientos sobre este deporte. Contacté con otra cultura, que giraba en torno a la playa y a la montaña, una vida muy diferente a la que conocía. Entonces, el surf de la isla pasaba por un momento delicado, debido al aumento de ataques de tiburón, lo que hizo que haya sido el año que menos olas he cogido, pero me dediqué a formarme en escalada, orientación...

-Y de ahí a Gran Canaria.

-En Las Palmas de Gran Canaria cursé otro año en la universidad y allí empecé a tomarme más en serio el mundo del surf y me puse a entrenar varias veces por semana con Héctor Medina, con el objetivo de aprender de él. No para competir, la figura del surfista competidor no es la mía? Y me formé como técnico en la Federación Canaria de Surf. Al acabar el curso volví a casa al enterarme de que, para la asignatura de Prácticum, hay una opción en el ámbito del rendimiento en surf. Volví y me formé como entrenador de surfistas de la mano de Jesús María Guerra.

-¿Cómo resultaron estas experiencias?

-Viajar hace que conozcas otras realidades y que a la vuelta veas tu vida desde diferentes perspectivas. Mis experiencias han sido buenas, no tan buenas, malas o maravillosas, pero nunca he dejado de evolucionar como persona.

-¿Qué nivel tiene el surf gallego?

-Nos queda mucho camino por recorrer. Aún no nos podemos comparar con países como Australia, EE. UU. o Brasil, potencias a nivel mundial, pero tenemos muy buenas condiciones a diario. Vamos por buen camino. Poco a poco el mundo de surf gallego se va profesionalizando, con gente muy cualificada y con ganas, que harán que el deporte base evolucione bajo buen criterio.

-Ahora decide abrir una escuela.

-En mi último viaje, en Australia, me di cuenta de que una escuela de surf es factible. En Noosa Heads (Queensland) hay varias escuelas y entrenadores en los que me fijé y me decidí a volver, con ganas y mucha energía positiva. Qué mejor que juntar mis dos pasiones, la enseñanza y el surf. Hace un par de años estuve a punto de intentarlo pero no me sentía con la fuerza necesaria. Ahora ya me he formado, me siento muy competente y tengo muchas ganas de trabajar en casa. Quiero dar a conocer nuestra preciosa costa, de manera sostenible, y tener tiempo para seguir viajando y formándome.

-¿Cuándo empezará a funcionar?

-Se llamará Ortegal Surf Escola y contamos con empezar a realizar actividades a partir de junio. La escuela buscará enseñar surf, dar a conocer una costa virgen, la de Ortegal, y concienciar sobre la importancia de cuidar el entorno. La gente de la zona tendrá descuentos en los próximos meses.

-¿Es posible vivir del surf?

-Sí, vivir del surf es posible a día de hoy y muchos amigos así lo hacen. Vivir del surf en nuestra zona es otra historia. Este año estaremos hasta el mes de septiembre y después, personalmente, me gustaría pasar el invierno trabajando en algún lugar más cálido, viajando, etcétera.

-¿Qué le aporta este deporte?

-Lo he hecho parte de mí. Cuando tengo un día malo, quiero surfear para que sea menos malo y cuando tengo un buen día, quiero ir al agua para que sea aún mejor. Pero, como en la vida, lo mejor de surfear es compartirlo.