Vuelve la familia de Neda que «aterroriza» a la comarca

NEDA

01 nov 2022 . Actualizado a las 18:26 h.

1Hay una familia en O Puntal, en Neda, que no deja de sorprendernos en las fechas señaladas en su particular calendario de celebraciones. Para los Carpente Rico, el Samaín, la Navidad y el Carnaval son días especiales en las que convierten su bonita casa en una especie de parque temático que no deja de recibir visitas por el espectacular trabajo que realizan y las performances que preparan. Desde el pasado domingo han convertido el entorno de su chalé en un terrorífico lugar en el que las brujas participan en un aquelarre, los fantasmas sobrevuelan el ambiente, los murciélagos reflejan sus siluetas en los muros de la casa, e incluso aparecen terroríficos personajes que provocan el miedo de los más pequeños y la sorpresa de aquellos que se acercan a esta zona de Neda. Este año hasta el vecino de enfrente de la casa de los Carpente se ha animado a emular a sus ya populares vecinos colocando en su finca una terrorífica figura. Mónica Rico y Diego Carpente y la hija de ambos, Omaira, se meten en su papel para crear un ambiente de terror. Eso, unido a las luces, la música, el humo y a todos los detalles de la decoración, consigue que la gente se sorprenda. Diego es el artista, Mónica la ideóloga y la pequeña Omaira se une a sus divertidos padres convertida en una pequeña brujita que reparte caramelos a los niños que se acercan a verles. Cada día hay función. Mónica dice que cuando ya habían gastado 300 euros en material dejó de contar, prefiere pensar en lo bien que lo pasan ellos y la gente que les visita. Este año se caracteriza usando un maquillaje a base de látex que le da un aspecto muy realista. Diego vuelve a ser Freddy Krueger. Si queréis verlos os recomendamos pasar por el número 29E de O Puntal de Abaixo, en Neda, donde está ubicada esta casa tan especial.

Hay ganas de celebrar

2Ya queda muy poco para que se inicie la celebración de la fiesta del Samaín o el Halloween a la gallega, y hemos descubierto que este año también quedan pocos disfraces por vender en establecimientos como Din y Don, en el número 882 de la carretera de Castilla, en Narón. Este año no ocurre como el pasado, cuando todo el mundo quería el disfraz de la serie El juego del Calamar. En esta ocasión la gente ha optado por lo más clásico, dicen María Amil y Mari Fernández, las responsables de esta macrotienda naronesa. «La gente este año ha venido buscando brujas, diablos, monstruos y esqueletos terroríficos, incluso nos han pedido el disfraz de la niña del exorcista, que no tenemos, pero que es muy fácil de elaborar con un camisón, una peluca y un poco de maquillaje». Las propietarias de la tienda afirman al unísono que así como este año la gente esperó a última hora para equipar a los niños para el colegio, lo de los disfraces para Halloween comenzó ya hace más de un mes. Afirman que se percibe «que la gente tiene ganas de fiesta después de tantas restricciones». Ahora tienen su mirada puesta en surtir la tienda con todos los juguetes de moda para la siguiente campaña, que también se adelanta, la de juguetes para Navidad y Reyes. Aseguran que este año ha arrancado ya con fuerza. Así que el consejo es que si no queréis fallar con los regalos, no lo dejéis para última hora.

«Outono ilustrado»

3El programa de visitas guiadas por la ciudad del Outono Ilustrado, que está en marcha desde el 24 de septiembre, son todo un éxito de participación. Los interesados deben inscribirse previamente a través del correo outonoilustrado@gmail.com o llamando al 631 683 070 de 10.00 a 14.00 horas, de lunes a viernes. El programa incluye visitas como la que realizaron el sábado un numeroso grupo de mayores de 65 años de la mano de Isabel Díaz Robles para descubrir los secretos del barrio de A Magdalena. El programa finalizará en noviembre con dos visitas. La primera el próximo día 5 en el palacio de Capitanía General, para la que este lunes se abría la inscripción y se completaron las 40 plazas en menos de dos horas. La segunda será el día 19 y llevará a los participantes por el Cuartel de Dolores y Fontelonga, la única puerta que se conserva del recinto amurallado de la ciudad. Atentos a los plazos de inscripción, se adjudican por riguroso orden de inscripción.