Las dos especies se encuentran en peligro de extinción
27 ene 2023 . Actualizado a las 22:33 h.Hubo un tiempo en el que tanto el can de palleiro como la oveja gallega estuvieron a punto de desaparecer del mapa. Ahora se mantienen como razas autóctonas en peligro de extinción. Y gracias a iniciativas como Ardexarxe, se potencian sus usos para el textil. Esta muestra de artesanía reúne en Narón de forma pionera hasta el 2 de febrero a profesionales vinculados con la lana autóctona gallega, pero también que realizan hilados a partir del pelo del can de palleiro. «Recuperamos el hilado de estas dos especies en peligro de extinción, las dos estuvieron a punto de desaparecer y dan un hilado muy bueno», explican Teté Mareque, creadora del proyecto, y Ana da Silva que representa a la asociación Camiño da Artesanía.
La iniciativa defiende especialmente «la lana de la oveja gallega autóctona, registrada y con denominación de origen, que tiene una gran calidad y debe darse a conocer». Pese a su uso masivo en el rural gallego hasta la primera mitad del siglo XX, fue desapareciendo «hasta ser considerada como un residuo por los propios granjeros, como un gasto y no un beneficio». Actualmente, 20 granjas en toda Galicia la producen con el amparo de la asociación Asovega: «Demostramos que podemos hacer maravillas con una mecha de hasta 15 centímetros, abrigosa y rústica porque se adapta al clima, es excepcional y logramos seis tonos».
La lana de oveja autóctona se expone en Ardexarxe a través de 22 técnicas distintas, «en alfombras, bolsos, mezclado con cerámica, cestería, bolillos contemporáneos, muñecos, trajes típicos, cuadros o fieltro». Y el hilado de can de palleiro se usa «para juguetitos o recuerdos de la mascota, llaveritos o pulseras... con un pelo muy suave y muy dulce». Teté Mareque teje el pelo de sus propios perros y lo emplea en alguno de sus muñecos, y cuenta con el respaldo del Club Can de Palleiro en Sedes (Narón). Otros tejidos salen de la cabra de angora o la alpaca, de granjas gallegas.
En Ferrolterra, Teté echa mano de la oveja autóctona de la granja A Calliqueira en Santa Marta de Ortigueira. Pero también trabaja con no autóctonas en la naronesa parroquia de San Mateo. Ahora, los 22 profesionales de Ardexarxe buscan «apoyo de las administraciones, para que Xunta y Deputación recuperen la lana gallega, sería genial retomar para nuestro textil las tradiciones de los abuelos». Ana lleva 25 años en el sector, pero Teté solo cuatro y uno luchando por esta lana autóctona: «Quiero retomar la tejeduría de los celtas». Profesionales de Bulgaria y Polonia ya usan este material gallego.