Una inmobiliaria pretende comercializar todo un bloque de viviendas antes del 2020
22 nov 2019 . Actualizado a las 17:28 h.El mercado inmobiliario resurge con fuerza en Narón. La última promoción de ventas surgida —pisos en venta por cuotas desde 235 euros al mes— en la macrourbanización Las Torres ha superado con creces todas las expectativas. Y así, solo para la jornada de puertas abiertas que se desarrollará durante toda la jornada de este sábado están concertadas ya más de 200 visitas, y el teléfono sigue sonando.
La apuesta de la firma Cisbar por aligerar la bolsa de viviendas a estrenar que siguen vacías una década después de la construcción del residencial ha resultado un éxito redondo. «Es tal la avalancha de interesados que hemos tenido que desplazar a todos los comerciales que tenemos en la zona de Viveiro y Barreiros», anota Laura García, que gestiona la promoción, y que la tarde del viernes recibía ya a los primeros clientes. Además, la compañía contempla que, al margen de las visitas ya fijadas, se acerque numeroso público sin previo aviso al inmueble.
Su reto: comercializar un bloque entero (el portal número 19 de la calle A Guarda) antes de que acabe el año, apostando para ello por una política agresiva de precios. Son en total 36 pisos de dos y tres dormitorios, con garaje y trastero a precios más que competitivos. «En la jornada habrá ofertas que permitirá hacerse con pisos por debajo de los 75.000 euros en pleno centro de Narón», anotan desde la firma.
Entre los inscritos para la jornada, figuran, tal y como señalan desde la inmobiliaria, muchos vecinos que viven de alquiler en esta misma urbanización, situado junto a la rotonda de Freixeiro —«por una cuantía inferior al que abonan actualmente pueden plantearse un piso en propiedad»—, gente que reside en viviendas antiguas sin ascensor y algún que otro inversor, interesado en hacerse con un lote de viviendas a bajo precios, si bien, señalan que esta opción no es lo que buscan para la torre. En paralelo, se reactivaron las tareas para colocar los bajos comerciales existentes.
Las primeras viviendas del complejo naronés, que dispone de más de 600 pisos construidos, se entregaron en 2008. La crisis del ladrillo acabó con la promotora del residencial, y el complejo quedó pendiente de rematar. En marzo, las grúas volvieron a la zona. Aliseda construye en este momento el bloque que quedaba pendiente.