El fiasco del polígono de As Boieiras

NARÓN

CESAR TOIMIL

Un millón y medio de metros cuadrados de suelo siguen a la espera de que la Sepes resuelva sobre el futuro de unos montes para los que se barajaron grandes proyectos

05 jul 2017 . Actualizado a las 17:43 h.

Los montes de As Boieiras, cuyos 1,5 millones de metros cuadrados de superficie se reparten entre los municipios limítrofes de Narón y Valdoviño, representan una importante reserva de suelo para la que desde hace más de medio siglo se barajaron grandiosos proyectos, pero ambos concellos siguen aguardando a que algunos de ellos se materialice. En la actualidad están en manos de la Sepes, entidad estatal del suelo dependiente del Ministerio de Fomento, que en los últimos años solo ha contratado trabajos de desbroce de la maleza y la tala de los eucaliptos, como medida de prevención de incendios.

¿Cuándo y con qué fin pasaron de manos privadas al Estado?

A finales de los años 60 del pasado siglo, el Ministerio de Defensa ejecutó una expropiación forzosa de los montes de As Boieiras con la idea de construir un gran helipuerto militar. El emplazamiento se consideraba muy idóneo, porque estaba al lado de la antigua estación de radio de A Carreira. En mayo del 82 la propuesta seguía adelante y el Boletín Oficial del Estado incluso publicó la señalización de un perímetro de seguridad de 300 metros. En el 88 aún no había visos del inicio de las obras, pero en un artículo publicado por La Voz se hacía referencia al «gran helipuerto de A Carreira» como una de las instalaciones de apoyo logístico que se construirían en Galicia como consecuencia de la incorporación de España al Tratado de Washington.

¿Cuándo se desestimó la propuesta del helipuerto?

La defensa nacional desestimó la propuesta de construir el helipuerto de As Boieiras en 1990, por «razones operativas».

¿Qué pasó entonces con los montes de As Boieiras?

Al transcurrir más de 25 años sin que se ejecutara el proyecto para el que habían sido expropiadas, las parcelas afectadas retornaron a manos de los antiguos propietarios particulares. El proceso de reversión se vio coronado en los años siguientes con la recompra de casi toda la superficie por la Sepes, si bien algunos propietarios no accedieron a la nueva venta, mientras que la mayoría de las familias cobraron dos veces por los mismos montes.

¿Qué nuevos proyectos se barajaron con las parcelas en posesión de la Sepes?

En el año 2000, y ante la falta de actividad del organismo estatal, los alcaldes de Narón y Valdoviño se reunieron con los responsables de la Sepes para solicitar la urbanización de As Boieiras o la cesión de los terrenos a los respectivos concellos. Con posterioridad, en el 2003, Narón barajaba un proyecto para construir un campo de golf y una zona de ocio en su parte del polígono, pero esas aspiraciones cambiaron cuando una sociedad privada construyó el campo de golf de O Val. A partir de ahí, ambos municipios optaron por la habilitación de suelo industrial para cuando se agotase el polígono Río do Pozo, algo que todavía no ha ocurrido.

¿Cuáles son las últimas peticiones municipales?

En el caso de Valdoviño, la demanda se centra en un polígono industrial que, de hecho, ya figura en el plan de áreas empresariales de Galicia, pero sin más avance. Narón, por su parte, aspira a un gran parque de ocio y a una urbanización de viviendas unifamiliares. Las parcelas de Narón tienen la calificación de suelo rústico apto para urbanizar.