Tienen que salvar hasta un quitamiedos sobre la carretera y piden un vial adecuado
31 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.«Terían que facer aquí unha baixada para os peóns, para que non teñan que dar toda a volta para chegar», explica un vecino de la parroquia de Santa Icía, en referencia al puente que cruza la autopista y que permitiría que los viandantes pudieran acceder directamente a la calle Xaquín Bruquetas a través del paso situado en el camino Espiño.
Actualmente, muchos viandantes acceden ya por un pequeño terraplén que hay en la zona. Un camino entre toda la maleza sirve de guía para bajar o subir por el mismo. Además, hay que pasar por encima de un quitamiedos que bordea la carretera. La otra alternativa para poder llegar a pie es dar toda la vuelta a través de la calle Espiño, en la que tampoco hay aceras, y que supone caminar medio kilómetro más para llegar al mismo punto. «Es que casi todo el mundo baja por aquí, porque si no hay que dar muchísima vuelta. Pero claro, no todos pueden hacerlo, no es tan fácil», explica un residente de Santa Icía.
Así, la adaptación de un camino en buenas condiciones en esa zona permitiría que los peatones pudieran dirigirse directamente al puente sin tener que dar tanta vuelta.
Las quejas de la asociación
Por su parte, la asociación de vecinos Trasancos demanda, a través de un escrito enviado al alcalde de Narón, José Manuel Blanco, y al resto de grupos políticos del municipio, ciertas mejoras en las conexiones de Santa Icía.
Por una parte, se quejan de que cuando se construyó la autovía que cruza la parroquia de Santa Icía se taponó la calle Xaquín Bruquetas. El actual alcalde era en ese momento concejal de Urbanismo en el ayuntamiento, y según cuenta la asociación, prometió que se prolongaría la Avenida da Solaina y se uniría a un puente que llevaría a la calle Grove. Sin embargo, el puente se situó a continuación de la calle Bon Xesús, lo que según la asociación de vecinos, ha causado diversos problemas a los residentes de la misma, pues hay un flujo de tráfico excesivo en relación a su tamaño. Además, según explican, no tiene aceras y está sin urbanizar. «Fixeron unha chapuza. Hai que facer algo, temos que protestar porque isto non pode ser», manifiesta el presidente de la asociación de vecinos Trasancos. La calle Bon Xesús, de sentido único, cuenta con una señal en la que se prohíbe el paso a todos aquellos que no sean residentes. Un acceso paralelo a dicha calle permite llegar al mismo punto, el puente que cruza la vía del tren.
La asociación vecinal solicita que «se remate a unión da prolongación da Avenida da Solaina e súa unión coa rúa Grove, comomo se recolle no Plan Xeral de Ordenación Municipal, porque tal e como está configurado o barrio esta é a única alternativa á Estrada de Castela para a entrada e a saída da parroquia», según se detalla en el escrito enviado a los partidos políticos.
El presidente de la asociación vecinal se reunirá el próximo martes con el alcalde de Narón, José Manuel Blanco, para tratar estos temas.