La 17ª Festa do Pemento de Couto congregó ayer a 450 comensales

NARÓN

Antes de dar comienzo la comida se sirvieron pimientos a los asistentes.
Antes de dar comienzo la comida se sirvieron pimientos a los asistentes. César Toimil < / span>

La biología Cristina Silvar, que no pudo estar presente, fue homenajeada

20 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El entorno del local social de A Picota acogió ayer la 17ª edición de la Festa do Pemento do Couto, un producto que cuenta con el distintivo de Indicación Xeográfica Protexida desde el año 2010. El evento incluyó una degustación gastronómica al precio de 12 euros por menú a la que acudieron 450 personas, que degustaron bajo una gran carpa 250 kilos de carne y 600 de pimientos de O Couto, entre otras viandas.

A la cita gastronómica, organizada por la Asociación de Vecinos de O Couto con la colaboración del Concello de Narón y la Cooperativa do Val, asistieron el alcalde, José Manuel Blanco Suárez; la concejala de Festas, Mar Gómez, y otros miembros de la corporación.

Los actos dieron comienzo a las 13.30 horas con la lectura del pregón a cargo del director del Centro Galego de Artes da Imaxe, Guillermo Escrigas, quien pronunció un ameno y a la par instructivo discurso, en el que recordó sus veraneos en el Muíño das Aceñas. Escribas echó mano de dichos populares, como el cartel que rezaba en un bar y decía «Cando vexas pementos do Couto come moito e fala pouco» y también de citas históricas, como el hecho de que la primera referencia en prensa al producto objeto de exaltación ayer era un artículo de J. Culebras que fue publicado en un periódico de Santiago en el año 1925, además de comentar alguna receta culinaria curiosa. En esta línea, ilustró a los presentes con un hecho histórico de la época de Felipe II: la construcción de una fábrica de bizcochos al lado del río Belelle para alimentar a las tripulaciones de los barcos y evitarles el escorbuto. Los bizcochos se servían ya entonces con pimientos de O Couto.

Finalizada la lectura del pregón se procedió a la imposición de la capa de la Orde de Damas e Cabaleiros do Pemento do Couto y la entrega del Pemento de Prata, que este año recayeron en la doctora en Biología Cristina Silvar, naronesa, que ayer no pudo estar presente por cuestiones de trabajo pero estuvo representada por la concejala de Feiras, Mercados e Festas de Narón, Mar Gómez.

A continuación, el alcalde, ataviado con la capa, le hizo entrega de un obsequio al pregonero y el dúo musical Tribal se encargó de amenizar la jornada antes de que se comenzasen a servir las raciones de la comida.

La elaboración de los menús corrió a cargo de un servicio de cátering que preparó el churrasco y los pimientos en las inmediaciones de la carpa instalada en la zona de A Picota. Las viandas se sirvieron acompañadas de cachelos, chorizos, criollos, pan, agua o vino y café al tizón, además de postre.

Guillermo Escrigas pronunció un ameno e instructivo pregón

El Concello organiza visitas guiadas al Monasterio de O Couto

Como complemento a las actividades lúdicas y gastronómicas que se estaban desarrollando en el entorno del local social de A Picota, se organizaron visitas guiadas al Monasterio de O Couto, situado en sus proximidades.

Las visitas, impulsadas por la Concellería de Turismo de Narón, que dirige Natalia Hermida, dieron comienzo a las 12.30 horas y concluyeron dos horas mas tarde.

Según la información facilitada por el gabinete de prensa del Concello de Narón, en esta primera convocatoria participaron alrededor de veinte personas, distribuidas en varios grupos.

Las visitas guiadas se mantendrán hasta el próximo día 15 de septiembre, todos los sábados de 11.00 a 13.00 horas.

Una guía acompaña a los visitantes durante el recorrido de aproximadamente media hora de duración por el cenobio naronés, explicando la historia de esta reconocida construcción de titularidad eclesiástica.

Las personas que deseen visitarlo con la guía deberán cubrir previamente una ficha con sus datos personales en la Oficina de Turismo de Narón, que abre sus puertas de lunes a viernes de 11.00 a 13.00 y de 19.00 a 21.00 horas, y los sábados y festivos de 10.00 a 14.00.

También se puede concertar la visita en el propio monasterio el día elegido, aunque en este caso está condicionada a la disponibilidad de plazas, ya que los grupos están limitados a entre seis y dies personas.