Una lucha sobre los usos de la senda y su peatonalización

Carla Elías Martínez
Carla Elías MUGARDOS

MUGARDOS

El vallado de un tramo es el último de los conflictos entre el Concello y Portos por el espacio

23 ene 2019 . Actualizado a las 20:41 h.

Antonio González, vecino de Mugardos, suele pasear sus dos perros por el paseo marítimo. Ayer se encontró con que un tramo se encontraba vallado tras autorizar Portos al Concello el cierre. «No sabía que estaba mal», reconoce. La denuncia nuevamente del deterioro de unos soportes del paseo -los primeros informes alertando sobre el estado se remontan al 2014- abre un nuevo conflicto entre ambos organismos sobre los usos del espacio y su estado. Por ejemplo, con respecto a quién debe arreglar este tramo. La administración local acometió en verano trabajos de limpieza y mantenimiento, y la empresa encargada volvió a dar la voz de alarma sobre la problemática. El Concello alega que no puede arreglarlo ya que no es el titular y no podría solicitar ayudas para llevar a cabo la importante obra estructural y espera un informe de Portos que aclare la situación.

El paseo, de unos seiscientos metros, es uno de los grandes atractivos de la villa, congrega numerosos locales hosteleros, a la cofradía de pescadores y en los últimos años ha sido escenario de series de televisión. «Es indudable que las vistas son espléndidas», apunta María Vázquez que, aunque cree que está en buen estado, propone que se invierta en mejorar la zona. Otro caballo de batalla municipal es la peatonalización. González reconoce que va a pie hasta el paseo, aunque prefiere que se mantenga abierto al coche. «Es más cómodo para todo el mundo, ya dispone de un buen paseo», destaca. Coincide Andrés Alba, responsable del Asador del Puerto. «El tema nos afectó bastante», recuerda con respecto al verano pasado cuando se cerró al tráfico por unos meses hasta que Portos obligó de nuevo a la reapertura. «No puedes hacerlo sin consenso, anulando aparcamientos cuando ya no hay en la villa y mandando a la gente llegar a la zona por campeiros», lamenta. Con respecto a la zona vallada desea que «ahora no eche así seis meses». También tiene un futuro incierto la Casa do Roloxo. El Concello ha propuesto un espacio alternativo para las instalaciones de Portos con la intención de demoler el edificio, abrir la fachada al mar y humanizar la zona. Sin embargo, no hay respuesta desde hace más de un año.

Estos proyectos pasan por la vía abierta a través de la Fegamp para solicitar el Concello la cesión de la titularidad de los espacios infrautilizados.