«Antes los chavales montaban mucho más follón en el autobús escolar»

MUGARDOS

CÉSAR TOIMIL

Durante 36 años llevó a clase a los estudiantes de Ares, Mugardos y Barallobre

03 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Casi cualquier niño de Ares, Mugardos y Barallobre conocen a Bolita. Y es más que probable que sus padres también. Juan Permuy García (Ares, 1953), más conocido como Bolita, fue el encargado de conducir el autobús escolar durante 36 años para llevar a los pequeños a las clases de los colegios públicos de Ares y Mugardos, el instituto mugardés y a los estudiantes de formación profesional en el instituto de Barallobre. Y no solo ha estado tantos años, sino que fue el primero en realizar estos recorridos. Tras casi cuatro décadas detrás del volante se ha jubilado recibiendo todo el cariño de sus compañeros de profesión y de los estudiantes.

«Lo sabían todos menos yo. El director del instituto de Mugardos se enteró una semana antes y el último día apareció con un ramo de flores y una placa», recuerda emocionado. «No nome de todas as xeracións que estudaron e viñeron ao instituto con Bolita ao volante, feliz xubilación», le dedicó el instituto a través de su web. También sus compañeros de Arriva, empresa que se encarga de estas líneas de transporte, le mostraron todo su cariño.

Juan empezó a trabajar como conductor para una empresa familiar, Transportes Ramil, durante tres años, tras la que pasó a la firma Fermín Maroño, la primera en realizar los transportes a los colegios públicos de Mugardos y Ares. Y de ahí recaló en Ideal Autos, antecesora de Arriva. «Siempre hice el transporte escolar a estas zonas, me las conozco enteras», comenta. Aunque a mayores también realizó viajes discrecionales, es decir, contratados por alguna empresa o grupo para un trayecto concreto, por toda Europa.

En estos años ha vivido en primera persona numerosos cambios demográficos, urbanísticos y normativos. «Cuente empecé, la ruta de Ares a Chanteiro y de Ares a Redes había que hacerla incluso dos veces porque no entraban los niños en un viaje», recuerda. Incluso teniendo en cuenta que las medidas de seguridad eran mucho más precarias. «Entonces podían ir tres niños en cada dos asientos», comenta.

Destaca la importancia del incremento de las medidas de seguridad. «Ahora los niños de menos de seis años tienen que ir siempre acompañados de un cuidador», señala. Y resalta que los adolescentes de hoy en día tienen mucho más cuidado en el autobús. «Antes los chavales de 16 y 17 años montaban mucho más follón, no les podías mantener sentados, estaban por el pasillo, gritaban... Ahora se suben al autobús y van escuchando su música», compara.

Pero lo que si que tienen en común los niños de hace treinta años con los de ahora son la familiaridad y el cariño por Juan. «Me saludan y me abrazan, se nota cuando vas en un autobús para un trabajo discrecional que ni te preguntan el nombre, aquí después de tantos años me tienen mucho cariño», agradece el exconductor.

En todos estos años nunca ha tenido un accidente escolar. El más grave fue en un viaje discrecional con un equipo volviendo de Avilés. «Se me metió un coche debajo, pero menos mal que la conductora no resultó herida grave», recuerda.

Viaje en coche o crucero

Aunque asegura que aunque no está cansado del autobús, ahora jubilado una vez de viajar optaría por hacerlo en coche porque «te da más autonomía si no es un viaje en grupo organizado». Como conductor conoce muchas ciudades de Europa como París, Roma o Londres, por lo que su ilusión ahora es poder llevar a su mujer en un viaje de crucero para celebrarlo.