Las rachas de viento alcanzaron los 166 kilómetros por hora en Estaca de Bares
12 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.«Foi ás oito e cuarto, o domingo á noite, o refacho de vento durou tres minutos e fixo o nunca visto», cuenta Suso Amado, de la granja Abella, en el lugar de Villarboi, en San Félix. El viento levantó medio tejado del establo, movió losas de la cubierta de la vivienda, dañó el gallinero y el hórreo, y tiró galpones y tabiques, que se cayeron sobre la maquinaria agrícola. El relato de este vecino de Monfero, muy preocupado por el ganado, que quedó a la intemperie, coincide con el de Alberto Muíño, de la ganadería Viñas, situada a unos 200 metros, en la misma parroquia.
«As uralitas da cuadra que non levantou, rachounas; caeron viguetas de oito metros e medio no corredor onde estaban as vacas [dos sufrieron heridas]. Tamén afectou á cuberta da palleira, onde gardamos a herba e algo de maquinaria, o panel sándwich apareceu a 500 metros; e esmagou a cheminea da casa», detalla este productor lácteo. Ayer, Muíño, que estima en más de 15.000 euros el coste de reparar «o máis urxente», no pudo ordeñar: «As vacas quedaron ao descuberto, coas camas coma piscinas, e co estrés non deron leite». «Nin comer queren», apunta su vecino.
Sin suministro eléctrico
La borrasca Ana azotó con especial virulencia algunos puntos de Ferrolterra y Eume, mientras en la comarca de Ortegal, en Cedeira o Valdoviño apenas causó destrozos, pese a la intensidad de las rachas de viento -hasta 166 kilómetros por hora en Estaca de Bares y 150,5 en Punta Candieira- y la lluvia. Los vecinos del lugar de O Piñeiro, en la parroquia de Vilachá (Monfero), pasaron casi 24 horas sin luz, recurriendo a generadores particulares para el ordeño, en el caso de varias explotaciones ganaderas afectadas. «La primera ráfaga ya nos dejó sin luz», lamentó ayer una damnificada. En Fene se quedaron sin suministro eléctrico unos diez minutos, igual que ocurrió en Ortigueira, a última hora del domingo, y en otros concellos también se produjeron microcortes. En San Sadurniño -en el parque eólico de Racamonde se registraron rachas de 130 kilómetros por hora- el viento derribó árboles y ramas, igual que en vías secundarias de otros municipios.
El temporal también afectó al tráfico ferroviario. Según indicó Renfe, pasadas las tres y media de la tarde, el ferrocarril que une Oviedo con Ferrol circulaba con una demora de 55 minutos debido a las condiciones atmosféricas adversas. La flota pesquera de Ortegal y Cedeira permaneció amarrada, debido al mar de fondo, y el oleaje arrastró a la playa alguna embarcación auxiliar en Cariño, donde el viento desprendió parte de la techumbre del antiguo cine La Solana.