Los responsables de los cámpings de la zona auguran buenas perspectivas de ocupación para este verano
30 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Las buenas vibraciones no solo se pueden palpar en hoteles y casas rurales, sino también en los cámpings de la zona. El de Ber no abrirá hasta mediados de junio, pero en el Fragadoeume, situado en Monfero y emplazado en una antigua granja rural en plena naturaleza, ya empiezan a notar movimiento. «Ahora tenemos a matrimonios extranjeros, sobre todo de Holanda y Francia, que prefieren viajar en mayo y junio para no coincidir con el mogollón de julio y agosto», explica su responsable, Olga Balado. Con vistas al verano, la propietaria del Fraga do Eume espera que los diez bungalows del cámping se ocupen «prácticamente al cien por cien». «Para las parcelas también tenemos buenas perspectivas, aunque todo dependerá del tiempo; habrá que cruzar los dedos», dice esperanzada.
A pocos kilómetros de allí, en Ares, las responsables del cámping del Raso miran al verano con optimismo. «La verdad es que no podemos estar más contentas, porque, a estas alturas, ya tenemos todo lleno para julio y agosto», anuncia Graciela Díaz, una de las socias del cámping.