Farero durante 45 años y coleccionista de quinqués

A. C.

MAÑÓN

ANGEL MANSO

Manuel Rivera Pérez (O Barqueiro 1926-2018) empezó a trabajar de torrero en las Illas Sisargas y se jubiló en Estaca de Bares

10 ene 2018 . Actualizado a las 18:14 h.

Manuel Rivera Pérez ha fallecido a pocos días de cumplir 92 años. Nació en 1926 en O Barqueiro, donde ha vivido desde su jubilación como farero. En 1946 ingresó en el cuerpo de torreros, oficio al que dedicó 45 años, primero en las Illas Sisargas ?«si había temporal, pasaban 15 días sin ir, necesitabas víveres en abundancia», contaba en una entrevista en este periódico?; después en Sálvora, donde se relacionaba con los colonos ?«hambre no pasábamos»? y en Prior. Tras año y medio en Mera (Oleiros), se mudó con su familia a Estaca de Bares, donde permaneció 36 años, hasta el retiro. «Era un faro de petróleo, de primer orden, con una óptica francesa de 1850, tan grande que un señor mayor y el cura jugaban a la baraja dentro», recordaba. Fue testigo de la construcción de la base americana, aunque apenas trabó relación con los militares. «Aquello era muy aburrido», evocaba, y él y su mujer, Carmen Méndez, se desplazaban con frecuencia en moto hasta O Barqueiro, junto a su hijo pequeño, Fran, con más de una caída por la pista sin asfaltar. Del oficio de farero le vino la afición por coleccionar quinqués, con los que se iluminaban en Bares, al carecer de electricidad. Todos se rompían y a Manuel se le ocurrió sustituir la base de cristal por una de latón. Desde entonces atesora quinqués, tanto réplicas como piezas antiguas restauradas, expuestas en el salón de su casa, en O Barqueiro.