Venta de pazos, noches en chalés indianos, autogestión y nuevas cadenas
01 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Todo una revolución para el mercado hotelero ha supuesto la puesta en venta del Pazo da Merced en Neda. Pero de semejante maremoto ya avisaba la ría en los últimos dos años, a través de una serie de ventas de edificios emblemáticos para su destino turístico: tanto centenarios chalés indianos como antiguos hoteles de los 80. Además, por el camino otros establecimientos han optado por la autogestión y también nuevas cadenas han llegado a la zona. Todo obedece al imparable tirón de esta comarca, un imán para los visitantes que se resume en las siguientes diez olas.
La más reciente es esa puesta en venta del Pazo da Merced por 3,7 millones de euros, con raíces en el siglo XVI, dotado con un total de 12 habitaciones de lujo (si se incluyen las de la vivienda), piscina y las mejores vistas a la ría. En el pasado mes de noviembre, una pareja de emprendedores se hacía con otra joya arquitectónica de la ría: la casa indiana de San Román, que adquirieron en subasta por menos de 100.000 euros. Por delante queda una ambiciosa reforma, pero Juan Ramos y Patricia Lorenzo se muestran dispuestos a «lo más pronto posible montar aquí una vivienda vacacional, que también se podrá alquilar para organizar bodas y otros eventos».
Quiso el destino (o el tirón ferrolterrano) que el chalé de Canido trabaje en un destino similar. Adquirido por el grupo hostelero La Penela, su futuro pasa por convertirse en hotel boutique con zona para bodas. El proyecto está en manos de Moncho Rey y Pedro Pablo Ríos, de As Built Arquitectura. Quieren «empezar las obras a finales de este 2025 y por delante tendremos un año de ejecución». El hotel con nueve habitaciones y restaurante estaría así listo a finales de 2026, pero todo depende de las licencias.
Tanto San Román como el chalé de Canido caminan por el estilo arquitectónico de Pazo Libunca. Este hotel de cuatro estrellas de Narón en los últimos años pasó a la autogestión, y ahora también asume en solitario sus eventos y bodas. El Almirante desde finales de 2023 lleva su gestión de forma individual en una sociedad limitada (a cargo del dueño del Libunca), tras salir del grupo Carrís.
Y en la llegada de nuevas cadenas hoteleras a la ría destaca Alda Hotels, que en la primavera del año pasado tomó las riendas del histórico Iberia para convertirlo en Alda Hotel Cabanas frente a la playa. Al mismo tiempo, cogió la gestión del albergue de Laraxe para transformarse en Alda Cabanas Nature. Ya en el mes de agosto de 2024, el mismo grupo reabrió el antiguo Kensington como Alda Narón: «Manteniendo el espíritu de este hotel de Xuvia de 1986, con 27 habitaciones, restaurante, terraza y bar».
La triple revolución hotelera se vive en Xuvia (Narón) con San Román, Kensington y el antiguo Basoa. Este último fue cogido este enero por la pareja argentina Darío Lostri y Lorena Rodríguez, como La Casa de la Abuela: «Como hostal y restaurante con bar, trabajando sin parar». Y otras novedades en alojamientos han sido la ampliación de Doniños Nature con La Villa, y la pronta apertura de Lake House en Valdoviño.