Un recluso en tercer grado atraca un estanco en Ferrol para comprar coca: «En la cárcel estoy mucho mejor, porque allí no me drogo»

Bea Abelairas
Bea Abelairas FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

La Policía Nacional detuvo al atracador del estanco de Catabois instantes después del asalto
La Policía Nacional detuvo al atracador del estanco de Catabois instantes después del asalto JOSE PARDO

Tendría que haber regresado el lunes al centro de reinserción de A Coruña, pero volvió a delinquir

15 ene 2025 . Actualizado a las 16:40 h.

La Policía Nacional detuvo el lunes a un hombre en el barrio de Catabois de Ferrol instantes después de que atracase el estanco número 30, el de Porta de Neira. Ya no llevaba el arma, un cuchillo, pero sí unos mil euros que logró arrebatar de la caja tras atemorizar a la empleada para que la abriese. Los vecinos fueron claves, porque fueron siguiendo al delincuente hasta que llegó la patrulla. Los agentes también encontraron el arma tras realizar una inspección por los alrededores.

El detenido pasó este martes a disposición judicial y el juzgado de guardia, Instrucción 2, decretó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza. Y él se mostró conforme, porque reconoció que ya estaba en el final de otra condena (también por asaltos), pero esta acción es fruto de su grave adicción a las drogas.

Mil euros

El pasado viernes salió del Centro de Reinserción Carmela Arias y Díaz de Rábago de A Coruña y no pudo resistirse a poner rumbo hacia Ferrol, donde la droga que consume es más accesible y económica. Está en tercer grado y tendría que haber regresado este lunes por la mañana, pero en lugar de hacerlo atracó a la desesperada el estanco de Catabois y logró un botín de mil euros. La Policía Nacional lo detuvo cuando corría hacia un campamento cercano y, tras pasar a disposición judicial, ingresó en la prisión de Teixeiro de nuevo.

El detenido: «En la cárcel estoy mucho mejor, porque allí no me drogo»

La abogada del turno de oficio que asistió al detenido poco pudo alegar. El hombre se derrumbó ante la policía y después ante la jueza de guardia: «En la cárcel estoy mucho mejor, porque allí no me drogo», confesó en los juzgados de Ferrol. También reconoció que consume cocaína de la manera más adictiva, porque se la inyecta. Los responsables de Asfedro apuntan que este método no es el habitual, aunque es altamente peligroso, porque los efectos de la coca llegan a la máxima intensidad mucho más rápido, aunque con la contrapartida de que tiene una duración muy corta. En consecuencia, el adicto siente la necesidad de volver a inyectarse con urgencia. Una espiral en la que este atracador, que ronda los cuarenta años, confiesa que le cuesta superar cada vez que sale a la calle.

En el 2017 ingresó en la cárcel condenado por asaltar gestorías en A Coruña

El hombre detenido por atracar un estanco en Ferrol ingresó en la cárcel en el 2017 para saldar una condena de siete años por asaltar gestorías en A Coruña. Ya estaba cumpliendo el tercer grado, en el final de la pena y con permisos de fin de semana, pero volvió a recaer. Así que regresará por un tiempo largo al penal.

En la declaración ante los agentes de la Policía Nacional que lo detuvieron esta vez, así como a su abogada y a la jueza de guardia se mostró derrotado por su adicción. Como si ya no le importasen las consecuencias, relató que viajó desde A Coruña a Ferrol para «pillar» cocaína y que antes de llegar al campamento paró ante el estanco, se cubrió cara con un cuello de felpa, se subió la capucha y amenazó a la dependienta con un cuchillo para que le diese todo el dinero del establecimiento.

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La víctima: «Tenía un cuchillo, la cara tapada, y solo repetía: Abre la caja ya»

La empleada del estanco que sufrió el atraco no quiere dar su nombre por miedo: «Estaba con un familiar de los dueños y no lo vimos entrar, cuando nos dimos cuenta lo teníamos detrás del mostrador», relata en un establecimiento en el que trabaja desde hace unos cuatro años. «Tenía un cuchillo, la cara tapada y solo repetía: ‘Abre la caja´, yo trate de retrasarlo todo lo que puede a ver si veía a alguien a ayudarme», explica sobre un instante crítico en el que el asaltante incluso llegó a coger la llave de la caja. Finalmente, el cajón del dinero se abrió y el hombre cogió todos los billetes. La empleada no sabe más, solo que en pocos instantes ya llegó la policía y le confirmaron que lo habían detenido. «También encontraron el cuchillo por ahí detrás tirado», apunta una joven que nunca había sufrido un atraco así.