Encuentran en la vivienda de los propietarios la boa desaparecida en Ferrol

FERROL CIUDAD

La boa que estuvo desaparecida una semana tras ser localizada finalmente en el domicilio de sus propietarios.
La boa que estuvo desaparecida una semana tras ser localizada finalmente en el domicilio de sus propietarios. RAMÓN LOUREIRO

Fue hallada por su dueños en una caja de cartón dentro del piso; un herpetólogo ha tenido que reanimarla por su baja temperatura corporal

19 may 2023 . Actualizado a las 00:05 h.

La boa constrictor albina que desapareció en Ferrol hace más de una semana fue hallada en la tarde de este jueves en el interior de la propia vivienda, ubicada en la calle Galiano. No solo no había salido del edificio, sino que ni siquiera había salido del piso. Lo que sí había abandonado era el terrario en el que estaba. Y fue encontrada escondida en el interior de una caja de cartón. Los dueños se habían ausentado de Ferrol durante varias jornadas y, con su retorno, se rastreó de nuevo toda la vivienda y se dio con el animal. La denuncia de su propietario por la desaparición tuvo lugar en pleno proceso de mudanza por parte de los dueños del ofidio.

Un herpetólogo se ha encargado de intentar reanimar al animal, que se encontraba con muy baja temperatura corporal. Tras estar fuera de su ambiente ideal, entre 28 y 30 grados, explica que el proceso consistió en que el animal recueprase su temperatura corporal lentamente. Además se le suministró por medio de una inyección el medicamento Duphalyte, un cóctel de vitaminas y aminoácidos. No ha sido necesario ponerle un antibiótico. Detalla que se trata de un ejemplar macho de una boa constrictor imperator albina, de 1,48 metros de longitud y un peso de 3,400 kilos.

Agentes de la Policía Local de Ferrol, liderados por uno de sus oficiales superiores, se personaron también en el interior del edificio. Finalmente, se confirmó la tesis que barajaba la Unidad de Medio Ambiente -una de las más modernas del país- de la Policía Local ferrolana: la serpiente no había abandonado la vivienda.

Fuentes próximas a la investigación subrayaban esta noche que «la Unidad de Medio Ambiente de la Policía Municipal, que llamó en todo momento a la tranquilidad, ya estaba convencida, desde el primer momento, de que la serpiente no había salido del piso». «No obstante -subraya la misma fuente- los agentes, por seguridad, investigaron todas las posibilidades, una tras otra, para ir descartándolas. Incluso que el animal hubiese accedido a un desagüe. Pero conforme pasaban los días ya estaban convencidos de que no había sido así, y su predicción se confirmó plentamente».

Finaliza ahora, por fin, y de la mejor manera posible, una historia que había sembrado la preocupación entre los vecinos de la zona. Especialmente entre los de la calle Galiano, donde se encuentra el inmueble. De hecho, propietarios de establecimientos del área, situada en pleno casco histórico de la ciudad, confesaban estos días que había visto reducidos sus ingresos al tener menos clientela por temor a la serpiente.

Tanto el propietario de la serpiente como el especialista que ha asesorado en todo momento a la Policía Local, Ángel Manuel Rico, siempre apuntaron que lo más probable era que la boa, a pesar de su tamaño, pudiese estar escondida, como así ha sido.

Los dueños de la boa estaban preocupados por su estado, pero al mismo tiempo han asegurado sentirse aliviados al encontrarla con vida y, sobre todo, al acabar con una situación que les ha sobrepasado por su repercusión.