José Luis Guevara, director de la Cátedra Jorge Juan: «La colaboración entre la Universidad y la Armada ha dado grandes frutos en Ferrol»

Ramón Loureiro Calvo
ramón loureiro FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

JOSE PARDO

Está convencido de que la ciudad verá cumplido su sueño de ser Patrimonio Mundial

30 ene 2023 . Actualizado a las 08:31 h.

El capitán de navío José Luis Guevara Romero (Cartagena, 51 años) es el nuevo director de la Cátedra Jorge Juan, institución desde la que el Campus de Ferrol y la Armada impulsan, conjuntamente, la difusión del conocimiento en ámbitos que abarcan desde la historia y la literatura hasta la economía y las tecnologías de vanguardia. Comandante (y también director) de la Escuela de Especialidades de la Estación Naval de A Graña (Esengra), es un gran lector, sobre todo de ensayo, y además un apasionado del mundo de la vela: de navegar, en comunión con el viento, escuchando la voz del mar.

—¿Qué es, en esencia, la Cátedra Jorge Juan?

—La Cátedra Jorge Juan es un lugar de encuentro, y un foro permanentemente abierto a las grandes cuestiones de actualidad, en donde caminan de la mano las humanidades y la ciencia. La colaboración entre la Universidad y la Armada ha dado ya grandes futuros en Ferrol, y sigue dándolos.

—En la Cátedra prestan ustedes una atención preferente a las cuestiones relacionadas con la actualidad internacional...

—Sí, así es. Esa es una de las líneas en las que queremos seguir trabajando. Creo que es necesario. Es importante que la sociedad cuente con espacios de diálogo en los que intercambiar ideas y en los que se escuchen voces muy cualificadas. Tenemos que pensar que lo que centra la actualidad en el ámbito internacional tiene su reflejo en la vida de todos nosotros. Sin ir más lejos, ahí está el caso del conflicto de Ucrania, que tan fuerte impacto ha tenido en nuestra economía.

—¿Cree que el Ferrol de las Luces, el que atesora el legado del siglo XVIII, y particularmente el de la Ilustración, logrará su objetivo de ser Patrimonio de la Humanidad?

—No me cabe ni la más mínima duda. Tiene todo a su favor para serlo.

—¿A qué se refiere?

—Quiero decir que Ferrol no solo posee un patrimonio extraordinario, tanto en lo material como en lo inmaterial, que lo convierte en una ciudad única. Sino que además se dan unas circunstancias muy especiales que juegan de manera decisiva a favor de la candidatura a Patrimonio Mundial. Y cuando hablo de esto, me estoy refiriendo, fundamentalmente, al masivo apoyo con el que cuenta esa candidatura en la propia ciudad. Tanto entre las instituciones como entre la ciudadanía. Ferrol ha asumido de manera muy decidida el objetivo de ser Patrimonio Mundial, y no me cabe duda alguna de que lo será.

—A propósito de la Ilustración: usted es un gran entusiasta de la figura de Jorge Juan.

—Así es, sí. La figura de Jorge Juan me parece fascinante. Como marino, como científico y hasta en esa faceta suya, quizá la menos conocida, en la que hubo mucho de aventura. Él encarna un momento fundamental en nuestra historia, en el que la Armada adquiere una dimensión científica que, a partir de entonces, ya no perderá jamás.

—¿Cree que es una figura suficientemente reivindicada?

—Pienso que no. Ni siquiera en Ferrol reivindicamos a Jorge Juan como él se merece. Y es un error no hacerlo, porque el legado de Jorge Juan nos permite comprender muy bien qué es Ferrol.

—Este año también tienen ustedes previsto dirigir su mirada a la figura de Gonzalo Torrente Ballester...

—Torrente tes otra figura fundamental. Creemos que hay que reivindicar la importancia de su obra literaria, pero además pensamos que es muy interesante profundizar en su relación con Ferrol, su ciudad natal.

«La memoria colectiva es algo esencial, y no podemos dejar que se pierda»

Mientras conversamos en su despacho de la Base Naval de A Graña —en el exterior, la luz de enero envuelve la ría, y el mar permanece casi inmóvil, aplacado por una tarde sin viento—, José Luis Guevara muestra los viejos grabados del Ferrol del tiempo de los grandes veleros. Unas estampas que lo están a su lado siempre.

—A Graña también es un espejo en el que se refleja el peso de la historia de Ferrol.

—¡Y tanto que lo es...! Aquí, en el siglo XVIII, comenzó todo, antes de que se tomase la decisión de ubicar los astilleros al otro lado de la ría para poder construir navíos de mayor tamaño. Pero desde entonces, en A Graña, la actividad ha sido ininterrumpida, no se ha detenido jamás. Desde el Siglo de las Luces, la actividad de la Armada ha sido aquí muy intensa. En a Graña ha habido hasta una Escuela de Pilotos...

—La figura del marino ilustrado, que tanta importancia ha tenido en la historia de Ferrol, se reivindica hoy, y con especial intensidad, de nuevo.

—Sí, y creo que es fundamental hacerlo. Los marinos ilustrados nos han enseñado, desde el siglo XVIII, a ampliar nuestra visión del mundo. Y a amar la ciencia.

—¿Hemos perdido la perspectiva sobre las cosas que nos aporta el paso del tiempo?

—A menudo creo que estamos perdiendo hasta la memoria colectiva. Y eso es algo muy preocupante, porque la memoria colectiva es algo esencial, y no podemos dejar que se pierda. Yo, que estoy muy en contacto con los jóvenes, veo que muchos de ellos ignoran, y esto es solo un ejemplo, lo que los grandes naufragios han supuesto para Galicia. No solo olvidamos el pasado, sino que a veces, por desgracia, olvidamos también lo que afecta, y de una manera muy intensa, a nuestro presente.