El viento derriba árboles sobre coches, antenas, la cubierta del colegio de Canido y unas chapas del puente de As Pías
FERROL CIUDAD
La mañana de este domingo ha sido más calmada; ayer los servicios de emergencias multiplicaron su actividad en toda la comarca
01 ene 2023 . Actualizado a las 12:25 h.El viento hizo mella ayer en toda la comarca. Solo durante la mañana del sábado los Bomberos de Ferrol ya llevaban más de una treintena de actuaciones. Entre otras muchas acudieron al colegio de Canido, donde se desprendió parte de la cubierta; trabajaron en el puente de As Pías, donde varias chapas que lo recubren están a punto de desprenderse. En la carretera de Catabois retiraron los cascotes de una fachada; una antena en la carretera de Castilla y fijaron otra en Baterías.
Además, un hombre al que le cayó encima un cristal en la calle Real resultó herido. Particulares que estaban en la zona del suceso llamaron al 112 hacia la una y media de la tarde, indicando que el vidrio se había precipitado desde una altura importante. En el operativo participaron los bomberos y la Policía Local de Ferrol, además de efectivos sanitarios.
Las rachas de viento derribaron, además, decenas de árboles en la comarca de Ferrolterra. Dos de ellos cayeron sobre sendos turismos, que estaban estacionados en Ferrol: uno en la plaza de Amboage y otro en la calle Ramón y Cajal.
Además, los bomberos han tenido que intervenir en numerosos lugares para retirar ramas caídas o talar troncos que se desprendieron con unas rachas de viento que fueron intensas durante toda la noche y continúan alcanzando los 47 kilómetros por hora a primera hora del sábado.
En Fene fueron tres los árboles que salieron volando y los contraincendios tuvieron que acercarse para despejar la zona, al igual que en Doniños, Río Seco, San Pedro de Leixa o Confurco.
La Policía Local de Ferrol informó de que también han sido muchos los contenedores y elementos de las calles que han salido volando, aunque no se han registrado daños graves.
Sobre las cuatro de tarde cesó la intensidad del viento, pero no la actividad de los servicios de emergencias, porque con la lluvia los contraincendios comenzaron a recibir llamadas de vecinos que acusaban los efectos del temporal del último día del año: «Los que no sabían que el viento les había causado daños en la cubierta lo están notando ahora con las filtraciones de agua en las casas», resumía uno de los responsables de atender las llamadas en la central del 092, donde el teléfono no dejó de sonar, al igual que sucedió con el de los Bomberos de Ferrol.
En el arranque de la noche del último día del año las incidencias se volvieron a multiplicar. Desde las nueve los bomberos trabajaron en la calle de la Iglesia retirando una antena; en San Felipe con restos de árboles desprendidos por el viento en otras zonas de la comarca. Las llamadas de los vecinos fueron constantes.
Este domingo, en lo que va de mañana, el escenario es de una mayor calma al no registrarse ya rachas de viento como las de ayer y con una lluvia mucho menos intensa.