El Puerto de Ferrol, un revulsivo necesario

Andrés Vellón Graña
Andrés Vellón LA GÁRGOLA

FERROL CIUDAD

Imagen de archivo de la obra de perforación del túnel a Caneliñas.
Imagen de archivo de la obra de perforación del túnel a Caneliñas.

15 dic 2022 . Actualizado a las 11:28 h.

El puerto exterior de Ferrol se fue haciendo casi a empujones. Hubo que reivindicar la segunda fase para que se abordase su obra y quedase completo. La construcción de la carretera a la rada se hizo a trompicones, con tres tramos separados y llegando al despropósito de tener el primer trecho y el último acabados, pero el del medio sin hacer. De chiste. De nuevo fue necesario reivindicar y reivindicar hasta que, en el 2009, se completó la infraestructura. La obra del tren ha llegado tarde y a rastras. Pero ha llegado. Y las previsiones apuntan a que esté operativo durante el próximo año. 

Todo ello ha sido necesario para que cuajara la situación actual. Una coyuntura en la que los muelles ferrolanos, tanto interiores como exteriores, se han convertido en un revulsivo económico e industrial. ¿Por qué? Porque esa ventana logística para la entrada y salida de mercancías dispone ya de una terminal de contenedores y esa obra ferroviaria en marcha. Hechos, no promesas. Y los hechos son la única forma de captar el interés de los inversores. 

Este jueves y viernes la Autoridad Portuaria Ferrol-San Cibrao celebrará las jornadas tituladas Impulsando la industria del futuro. Nada es casual. En ese marco se hablará del impacto económico que las empresas marítimas generan en Ferrolterra; de energías renovables; de hidrógeno verde; de tejido empresarial... Y también de turismo de cruceros. Temas impensables hace apenas dos décadas son hoy una realidad. Y, en buena medida, lo son porque el Puerto está ejerciendo al fin su papel de palanca de apoyo, de elemento de atracción de empresas y, por tanto, de generación de movimiento económico y empleo. Para muestra, un botón. La rada ha sido un elemento clave para que la china Sentury se haya decidido por As Pontes para asentar su planta de neumáticos. 

En definitiva, hay realidades encima de la mesa y buenas perspectivas para el futuro. Ahora toca que, con cada cual haciendo su parte y sin zancadillas, se continúe con ese proceso de captación de inversiones. Solo de este modo se podrá hablar al fin en serio de una diversificación industrial en Ferrolterra. La pinta que tiene el horizonte es buena, pero hay mucho que hacer todavía. Las capacidades e infraestructuras del Puerto de Ferrol lo facilitan. Ese revulsivo ya está aquí. Sería un error muy grave desaprovecharlo.