Una imagen promocional de la película «Un hombre de acción» ha llamado la atención por la presencia del grafiti convertido en eslogan de la ciudad: «Ferrol mola»
03 dic 2022 . Actualizado a las 15:02 h.El makako amarillo más famoso e internacional de Ferrol ha dado también el salto a la gran pantalla de la mano de Netflix y todo fruto de la casualidad. El grafito, que ya es todo un emblema en la ciudad, ha logrado llevar el mensaje de «Ferrol mola» a los puntos más dispares del globo terráqueo y se anota ahora un nuevo tanto. Nueva York, Ámsterdam o Ciudad de México son solo algunos de los lugares en los que el artista anónimo y promotor de esta iniciativa ha dejado la impronta de la urbe naval. Hace unas horas, una imagen promocional de la película Un hombre de acción, rodada en Vigo y protagonizada por Juanjo Ballesta, marcaba un nuevo hito para la historia de este icono del arte urbano.
«Que las calles de Vigo parezcan París», rezaba el texto de la publicación colgada en Twitter por la plataforma de streaming, en referencia a que la película versa sobre la vida del histórico anarquista navarro Lucio Urtubia y se ambienta en la capital gala, entre las décadas de los 50 y los 60. No obstante, la vista de los ferrolanos se ha desviado inconscientemente al fondo de la segunda de las cuatro instantáneas del rodaje, compartidas por Netflix. Allí, tras un andamio en el que se encuentra encaramado Juanjo Ballesta, sonríe imperturbable el makako de Ferrol Mola.
Las reacciones en la citada red social no se han hecho esperar y muchos han querido subrayar el cameo improvisado del makako amarillo. «Ferrol Mola (en parisino: me comí unos caracoles de mantequilla)» o «Ferrol mola de fondo» han sido algunos de los comentarios que evidenciaban que el grafito con sello ferrolano se había convertido en el protagonista inesperado de la publicación.
"Ferrol Mola" (en Parisino: Me comí unos caracoles con mantequilla Oh la la) https://t.co/FQfqJ9XcHx
— ??Xacobe en Navidad? (@Jacky_el_playas) December 2, 2022
Una anécdota que hará que inevitablemente los ferrolanos que opten por visionar la película escruten minuciosamente cada fotograma en busca de un icono del que sacar pecho con una pegatina en la parte trasera del coche, una bolsa para ir a la compra, una chapa en la cazadora, la pared de cualquier edificio abandonado de cualquier rincón del planeta y desde ahora también en el panorama audiovisual.