«Sé que corro más peligro que los demás, así que toca ponerse la cuarta dosis»

beatriz antón FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

KIKO DELGADO

Mercedes Lamas, en tratamiento por cáncer de mama, ha sido una de las primeras personas de alto riesgo en recibir el pinchazo extra en Ferrol

25 feb 2022 . Actualizado a las 19:23 h.

La batalla contra el covid alcanzó ayer un nuevo hito en el área de Ferrol con la inauguración de la campaña de inmunización con la cuarta dosis de la vacuna para la población de alto riesgo, es decir, aquella que tiene más probabilidades de sufrir complicaciones si contrae el virus: desde enfermos oncológicos hasta adultos mayores de 40 años con Síndrome de Down, pasando por personas con VIH, inmunodeficiencias primarias, en diálisis o trasplantadas.

Mercedes Lamas, ferrolana de 49 años en tratamiento con quimioterapia por un cáncer de mama, pertenece a ese colectivo. Y este miércoles fue una de las primeras personas en recibir el pinchazo extra en el Hospital de Naval de Ferrol, donde desde ayer y hasta mañana viernes han sido convocadas seiscientas personas.

«La verdad es que no me esperaba que me fuera a tocar ya, porque para la tercera dosis me avisaron con más antelación, pero esta vez ha sido todo muy rápido. Me llamaron el martes y hoy mismo (por ayer) ya me la ponen», comentaba Mercedes poco antes de la cita.

Tras haber pasado por dieciséis sesiones de quimioterapia, una operación para extirparle los tumores y varias sesiones más de radio y quimio tras la intervención —en teoría ahora solo le queda dos—, Mercedes acudió a ponerse la cuarta dosis «sin nervios y tranquila». Pero no oculta que antes le asaltaron algunas dudas. En primer lugar, porque este viernes le toca la siguiente sesión de quimioterapia. «Me daba miedo que con la vacuna llegase machacada a la quimio, pero me han dicho que si me la pongo antes no pasa nada. Si me tocase la vacuna justo después sería diferente. En ese caso tendría que esperar, porque con la quimio te bajan mucho las defensas», apunta.

Pero a Mercedes también le ha creado cierta incertidumbre las últimas noticias sobre la cuarta dosis. «En la tele escuchas muchas informaciones distintas, algunas contradictorias, y eso siempre te siembra dudas», apunta. «Si no estuviese enferma, no me la pondría, porque creo que con tres es suficiente. Pero yo sé que corro más riesgo que los demás, por estar con la quimio, así que toca ponerse la cuarta dosis, que es lo que recomiendan los médicos», comenta a renglón seguido.

Mercedes cree que haber sido diagnosticada en cáncer en tiempos de covid no le ha supuesto un dolor añadido: «Al revés, yo creo que en cierta manera me ha ayudado, porque sentí que no era la única a la que se le paraba el mundo. Además, yo vivo sola y estoy a gusto así. No lo llevo nada mal. Y seguramente por eso no me afectó tanto como a otras enfermas el no poder reunirme con más gente debido a las restricciones o por encontrarme sin fuerzas para ello», reflexiona. Cuenta que el tratamiento ha sido «duro», pero decidió «echar para adelante porque no te queda otra». Y ahora que ya casi ha finalizado el tratamiento, solo piensa en ponerse bien, recuperar las fuerzas y encontrar trabajo. «Lo necesito, porque pedí la incapacidad mientras durase el tratamiento, pero todavía no me han contestado, y ahora solo tengo el ingreso mínimo vital, que no me llega ni para el alquiler», comenta para a continuación agradecer todo el apoyo que le ha prestado la Asociación Española de Lucha contra el Cáncer. «Ofrecen atención psicológica y me pagaron tres meses el alquiler».

RAFAEL RODRÍGUEZ, PRESIDENTE DE ALCER Y TRASPLANTADO DE RIÑÓN

«Si estando vacunado me tuvieron que ingresar por covid, sin ella seguramente no lo podría contar»

En la imagen, Rafael Rodríguez, presidente de Alcer Galicia
En la imagen, Rafael Rodríguez, presidente de Alcer Galicia SANDRA ALONSO

Rafael Rodríguez cumplió este mes de febrero 29 años como trasplantado de riñón. «Gracias al sistema sanitario y a la generosidad de la persona que me donó su órgano sigo aquí y lo puedo contar», dice al preguntarle por el aniversario de su «segunda vida». Al presidente de Alcer todavía no le han llamado para la cuarta dosis de la vacuna (porque todavía no han pasado cinco meses desde que le pusieron la tercera), pero en cuanto lo convoquen no dudará en acudir a la cita.

«Creo que dudar a estas alturas de la vacuna no tiene sentido, y menos todavía en el caso de los trasplantados, que tenemos más riesgo de sufrir complicaciones porque, por la medicación que tomamos para evitar el rechazo, tenemos las defensas más bajas», comenta. Sabe bien de que lo habla, porque el pasado mes de agosto contrajo el virus y pasó siete días en el hospital: «Si estando vacunado me tuvieron que ingresar por covid, sin ella lo habría pasado mucho peor o seguramente no lo podría contar», dice convencido. «Mi confianza en la sanidad púbica es máxima», subraya Rafael Rodríguez.