Feijoo descentraliza el Consello de la Xunta para reivindicar Ferrol

FERROL CIUDAD

Feijoo y sus nueve conselleiros durante el Consello de la Xunta celebrado este jueves en Ferrol.
Feijoo y sus nueve conselleiros durante el Consello de la Xunta celebrado este jueves en Ferrol. JOSE PARDO

Desembarco autonómico en la ciudad con nuevos proyectos y el nombramiento de Martina Aneiros como delegada territorial

28 ene 2022 . Actualizado a las 12:16 h.

Un presidente autonómico y nueve conselleiros en Ferrol. Hay que remontarse más de una década atrás para encontrar el último precedente de una conjunción que Alberto Núñez Feijoo buscó para refrendar su apuesta por la ciudad naval. El Consello de la Xunta hizo este jueves las maletas para cambiar por esta semana la moqueta de San Caetano por las funcionales dependencias del edificio administrativo ferrolano en la plaza de España. Ya ocurrió en el año 2009, cuando acogieron sendas visitas del órgano decisorio del gobierno autonómico varias ciudades gallegas. Pero es la primera ocasión en esta legislatura en que abandona Santiago. 

Lo hizo para arropar con la escenografía adecuada la reciente creación de la delegación territorial ferrolana, la sexta de Galicia, y poner a Ferrol en el mapa institucional de la comunidad autónoma y a la altura, destacó, de otras ciudades de mayor población como A Coruña o Vigo. Y también para confirmar oficialmente lo que ya se conocía desde la víspera: que Martina Aneiros Barros será la cabeza visible de ese organismo.

El desembarco autonómico llegaba con una abultada carpeta de temas ferrolanos. El anuncio, por ejemplo, de que este año no habrá límite presupuestario para las obras de ampliación del Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol (CHUF), la futura creación de una nueva senda peatonal y ciclista entre el puerto y el inicio de A Malata o que Ferrol pasa a ser considerada ciudad Rexurbe para el impulso a su rehabilitación, la segunda de Galicia tras A Coruña -además de los municipios de Mondoñedo, Ribadavia, Tui y Ribadeo-. Y aunque Ferrol copó buena parte de los acuerdos de este Consello descentralizado, Feijoo desgranó en casi una hora de comparecencia posterior el análisis de la pandemia, la devolución del IVA por el Gobierno, convertir en BIC la biblioteca de Emilia Pardo Bazán, la digitalización de la administración de justicia o el éxito del balance del bono turístico.

Pero Ferrol era el objetivo. Feijoo enarboló un balance de 80,3 millones de euros invertidos en la zona en el 2021. Y el desarrollo del Pacto de Estado que propugna, con cien medidas concretas anunciadas en abril y de las cuales considera cumplidas un buen puñado de ellas. Como la nueva delegación territorial, una medida política y administrativa con la que se da a Ferrol, destacó, «o estatus de administración territorial da Xunta», algo «histórico» que se traducirá en mayor interlocución, afirmó. Todo con un gasto «moi comedido», limitado, dijo, al salario del personal que tendrá. «Calquera expediente que poida afectar a persoas que convivan nestes vinte concellos [los pertenecientes a las comarcas de Ferrol, Eume y Ortegal] a delegada territorial en Ferrol será a interlocutora definitiva entre os cidadáns e a Xunta», defendió.

La creación supondrá también la ampliación física de los dominios autonómicos en la plaza Camilo José Cela, con la adquisición de una parte del mismo edificio.

Rey Varela se encamina hacia las próximas municipales 

El nombramiento de la ya exconcejala ferrolana Martina Aneiros -cuya renuncia al acta de edila la presentaba este mismo jueves y se incluyó en el orden del día del pleno convocado para la tarde- agita el panorama político local. No tanto por los cambios que acarreará -será necesario cubrir su vacante en el Concello y también como representante local popular en la Diputación Provincial- como por el escenario de precampaña electoral que se avecina, a poco más de un año de las municipales. En el juego de tronos local las apuestas para el cargo se dividían entre el jefe de la oposición ferrolana, el exconselleiro, exalcalde y presidente del PP local José Manuel Rey Varela, y su eterna segunda, a la que fichó en 2008 y que entró en la corporación ferrolana en el 2011. Pero que el líder popular dejase su acta para ocupar durante solo unos meses este puesto, si finalmente volvía a optar a la alcaldía, hacía más improbable la operación. Por ello, Aneiros es la pieza que mejor encaja en el puzle: persona de confianza de Rey Varela, su portavoz adjunta en este mandato y la que lo sustituyó en el 2015 cuando él asumió la Consellería de Política Social. Y vía libre para que el exalcalde siga liderando la oposición, al tiempo que la nueva delegación, con su papel visibilizador de las políticas autonómicas en la zona, llena de renovada munición la recámara de su futura campaña electoral.

Feijoo no quiso resolver todavía el rompecabezas. Amagó una suerte de sonrisa titubeante ante la pregunta de si se despeja así el camino para que Rey Varela sea de nuevo cabeza de cartel. «A verdade é que non podería contestar. Primeiro, porque non pensamos niso. Segundo, porque no que estamos nestes momento é traballando nos congresos locais das cidades, e supoño que en Ferrol temos que facelo antes de xullo. Veremos cal é o candidato para presidir o partido», se limitó a decir antes de desviar la atención hacia los motivos que llevaron a elegir a Aneiros como delegada. Asegura que su nombramiento fue por «unanimidade ou asentimento», de todas las personas consultadas, tanto en la Xunta como en el Concello. «Incontestable, desde o punto de vista de formación e de experiencia. É moi difícil atopar unha persoa que teña experiencia política e unha actividade profesional liberal», dijo en referencia a una abogada de la que destacó que tiene una asesoría jurídica abierta. «E con experiencia na oposición e no goberno», ya que Aneiros fue concejala de Recursos Humanos e Emprego durante el mandato de mayoría absoluta de Rey Varela. 

En los corrillos políticos de las distintas formaciones se da por seguro que Rey Varela, el segundo candidato urbano que mayor apoyo recibió en las últimas municipales solo por detrás de Abel Caballero, y que se quedó a solo un concejal -o «medio», como alude él mismo- de gobernar Ferrol con mayoría absoluta, será de nuevo el candidato popular. En el 2019 no lo consiguió. Al PP le perjudicó la concurrencia de otras candidaturas, especialmente de Ciudadanos. Pero con la formación naranja en horas bajas y en la práctica desaparecida en la ciudad, tanto en el seno de su formación como de otros partidos se considera que Rey Varela tendrá una nueva oportunidad. Y que además, es la única baza que tiene en este momento el PP para conseguirlo.