El Concello de Ferrol ya había adquirido otros dos drones en diciembre del 2018, que en principio estaban destinados a los bomberos, con posibilidad de que los utilizara también la Policía Local. Pero finalmente quedaron solo en manos del servicio de extinción de incendios, porque la reglamentación es distinta cuando se utilizan para fines de emergencia o policiales. Y es que para que la policía pudiese volar los drones de los bomberos tendría que solicitar permiso a Aena —Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea—, mientras que con el suyo propio no necesita tantos requisitos administrativos, de ahí que tenga que dotarse de un reglamento interno de utilización.
En cuanto a los dos equipos con los que cuentan los bomberos, a lo largo de estos tres años les han sido de mucha utilidad en la búsqueda de personas desaparecidas, en perímetros de incendios y también en revisiones de fachadas e inmuebles con peligro de derrumbe.