El presunto autor de tres asaltos en negocios de Ferrolterra ya está en la cárcel
16 oct 2021 . Actualizado a las 09:14 h.Había conseguido dar esquinazo al amplio dispositivo policial desplegado el pasado día 8, integrado por cerca de una treintena de agentes de las distintas fuerzas de seguridad, pero, finalmente, el atracador encapuchado que tanta alarma causó en la zona de Ferrol las últimas tres semanas ya está entre rejas, aunque como medida preventiva mientras no se celebra el juicio. En el marco de la denominada Operación Educado -tras el asalto a una farmacia pidió disculpas a dos clientes diciendo: «lo siento por las molestias»-, el Equipo Territorial de Policía Judicial de la Guardia Civil de Ferrol logró localizarlo este jueves, día 14, en una casa okupa de la parroquia de Santa Icía y procedió a su detención. Tras pasar la noche en el calabozo del cuartel de la calle Virgen de la Cabeza, en Ferrol, el arrestado fue trasladado a primeras horas de ayer al Palacio de Justicia y allí fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 3, en funciones de guardia.
Ya cerca del mediodía, después de varias subidas y bajadas en el ascensor entre los calabozos del sótano y la quinta planta, en la que se encuentra la sala de vistas del juzgado, el detenido, esposado y escoltado en todo momento por dos guardias civiles, y asistido por un abogado del turno de oficio, recibió la comunicación de su ingreso en prisión provisional como presunto autor de tres delitos de robo con violencia e intimidación.
El investigado es un hombre de alrededor de 40 años, natural de A Capela y domiciliado en ese mismo municipio, si bien la Guardia Civil lo detuvo en una casa okupa en Santa Icía.
Los tres atracos de los que se le responsabiliza inicialmente son los registrados, por este orden, en la gasolinera de Rego da Moa, en Fene -736,70 euros de botín-; en la farmacia de Campolongo, en el municipio de Pontedeume -700 euros-; y en la gasolinera de Laraxe, en el concello de Cabanas -465 euros-.
Los tres corresponden a la demarcación de la Guardia Civil de Ferrol y el equipo de policía judicial del instituto armado logró reunir pruebas suficientes que permiten atribuirle su autoría -se le intervinieron las prendas, las armas y el vehículo-, motivo por el que la jueza de guardia dictó su ingreso en prisión provisional.
En total, se le atribuyen tres delitos de robo con violencia e intimidación y otro contra la seguridad vial por conducir un vehículo a motor careciendo del permiso por pérdida de vigencia, pero es que además tenía en vigor una requisitoria de búsqueda, localización y personación dictada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Ferrol.
Otros dos robos sin esclarecer
Pero faltan por esclarecer otros dos asaltos en los que también existe la sospecha de su autoría, registrados en un despacho de pan de Santa Icía y en la estación de servicio del Alto do Castiñeiro, en Narón. En este caso la competencia es de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Ferrol-Narón, que ya está realizando las correspondientes investigaciones al respecto.
En el primero de los robos, el cometido en el despacho de pan, el autor había intimidado a la víctima con unas tijeras; mientras que en dos de las gasolineras, en las que iba encapuchado, exhibió un cuchillo; y en la farmacia también portaba un arma blanca.
Sin embargo, en la estación de servicio de Laraxe, en la que se cubría con un gorro, no mostró ningún objeto intimidante, sino que empujó al empleado y le sacó por la fuerza el dinero que tenía en la cartera de trabajo.
La pista que las fuerzas de seguridad siguieron la jornada del gran despliegue por varios municipios de la zona fue el vehículo utilizado al huir de la farmacia de Campolongo. En el operativo habían participado cinco patrullas de la Policía Nacional, tres de la Guardia Civil, otros cinco de la Policía Local de Ferrol, además de los agentes de las Policías Locales de Pontedeume, Fene y Narón que ese día estaban de servicio.
El atracador logró darles esquinazo en la rotonda de Basanta y la búsqueda se centró por San Xoán, Santa Mariña, Catabois y Santa Icía, así como el entorno del hipermercado Alcampo, en el polígono de A Gándara.